CAJA NEGRA

La democracia electoral en México y de manera notable en San Luis Potosí, tiene aún muchas deficiencias, defectos, carencias, lagunas o como se le quiera ver. Hay una serie de instituciones públicas encargadas de que esa democracia electoral se vaya perfeccionando y adecuando a las circunstancias históricas y a las exigencias de la sociedad.

 

Están los partidos políticos, las autoridades electorales, la fiscalía y el tribunal elector y fundamentalmente el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana, así como la vocalía local del Instituto Nacional Electoral, pero también autoridades civiles que tienen responsabilidad en el respeto a la democracia electoral.

 

En las elecciones de este domingo, se aplica por primera vez una ley electoral local y una federal que son resultado de la reforma política emprendida en México tras el escandaloso triunfo de Enrique Peña Nieto, quien bajo la sospecha y bajo la sombra de la duda, emprendió reformas para dar más transparencia y equidad en la democracia electoral.

 

Todos los partidos avalaron la reforma política de la que nació el INE y los Organismos Locales Electorales. Se cuenta entonces con nuevas reglas y con nuevas autoridades en lo que se espera sea un paso hacia delante en la democratización de las elecciones.

 

Hoy tenemos nuevos partidos en contienda que se agregan a los ya establecidos y todos buscan a nivel federal, la mayoría legislativa en la cámara baja y, a nivel local, la gubernatura, presidencias municipales y diputaciones locales.

 

Es el momento de la ciudadanía, del electorado, de una sociedad que viene demandando desde hace tiempo un país distinto. El México de ahora es un México atribulado, violentado a diario, avasallado por la corrupción y golpeado por el crimen organizado.

 

Es un país de enorme riqueza que desafortunadamente es al mismo tiempo uno de los más desiguales del mundo. Tenemos a unos cuantos inmensamente ricos y a una mayoría pobres en extremo.

 

Cambiar las condiciones actuales del país depende de muchos factores y de la suma de muchas voluntades y acciones, pero la más importante de éstas, son las elecciones. La participación con el voto es fundamental para apurar los cambios que demanda la nación toda.

 

Hay muchos candidatos, los cuales ya expusieron su propuesta, su oferta política y de gobierno. Ya nos dijeron en mayor o menor medida quienes son y que quieren hacer.

 

Puede ser que no sean en su conjunto lo que desearíamos tener y lo que urge tener como candidatos ante las urgencias que enfrenta México y San Luis, pero eso es lo que hay. En ese sentido, es importante reflexionar el voto, pensar y repensar acerca de quien ha de recibir nuestro sufragio. Se trata de una decisión muy importante, no la desechemos, no la desaprovechemos.

 

Incluso están los candidatos no registrados, los candidatos independientes, cualquier forma de votar es buena menos la de anular el voto.

 

Hay que ir a votar no solo pensando en los cargos que están en juego, sino en cómo será la conformación del poder público: pensar, por ejemplo, en un Congreso del Estado sin mayoría, que no quede secuestrado en manos del ejecutivo, que sea un real contrapeso que de equilibrios al poder público.

 

Hay que pensar en alcaldes y cabildos plurales, si el gobierno municipal ya falló, hay que buscar una nueva alternativa. Candidatos y otros partidos están al alcance de la mano, hay que aprender a castigar al mal gobierno.

 

Como sea, es de esperar que los potosinos no se queden en casa, que vayan en masa a las urnas y que se venza, en primer lugar, al abstencionismo. Confiemos en que las autoridades electorales harán valer y respetar el voto.

 

No le siga el juego a los partidos que le apuestan al triunfo con su voto duro y con el voto comprado, vaya a votar y haga valer el derecho ciudadano de elegir libremente a sus representantes.

 

 

Skip to content