Por: Antonio González Vázquez.
La Encuesta Nacional de Victimización y Percepción Sobre Seguridad Pública dice que en San Luis Potosí se denuncian solamente 6.5 de cada 100 delitos y de ese número tan marginal, solo en el 54.5 por ciento de los casos se inicia una averiguación previa. Es decir, del total de delitos tan solo en el 3.5 por ciento de inició una averiguación previa.
Si acaso eso no fuera suficiente para embargarnos de pesimismo y desilusión, habría que sumarle el dato que ofrece hoy este diario digital respecto del cumplimiento de órdenes de aprehensión solicitadas al poder judicial por la Procuraduría General de Justicia, a través del Ministerio Público.
Solo una de cada dos órdenes de aprehensión se cumplimenta, es decir, la mitad de los casos se queda en la impunidad por semanas, meses y quizá, por años.
Patético, a un poder judicial enviciado y corrupto, se suma una estructura de procuración de justicia enviciada, corrupta, ineficiente y por si fuera poco, lenta.
Ni cómo esperar algo positivo en el ya próximo primer informe de gobierno de Juan Manuel Carreras.