CAJA NEGRA: La línea es que para “Manuelita” sí hay línea

 

El reconocimiento del diputado Oscar Vera de que la elección del nuevo magistrado para el Supremo Tribunal de Justicia se concretará con la “línea” del gobernador, es una desvergüenza. Es decir, los diputados votarán según el sentido que les dicte el mandatario estatal. Esto no deja de ser una fatalidad en la débil estructura institucional potosina y es una muestra de que la división de poderes no es más que una broma.

 

Que las cosas de la política y del gobierno y de la administración pública y de las instituciones públicas operen de ese modo tiene una explicación.

Ayer, en Berlín, la Organización no Gubernamental, Transparencia Internacional dio a conocer el Índice de Percepción de la Corrupción 2015. Es el retrato de la corrupción mundial. México se coloca en la posición 95 del Ranking. El país logró calificación reprobatoria con apenas 35 puntos.

Para Transparencia Internacional, México se coloca entre los países más corruptos, menos democráticos y más pobres. Y claro, San Luis Potosí es reflejo de lo que pasa en la nación.

Cuando el diputado Vera reveló que la elección del magistrado que sustituirá a Zeferino Ezquerra será aquel que sea el nominado por la línea que envíe Juan Manuel Carreras, solo confirmó por qué México está en esa posición de corrupción y falta de democracia plena.

Que los diputados reciban línea del gobernador en turno se ve ya como algo normal, como la costumbre que priva por encima de los procesos legales, democráticos e institucionales.

Es una verdadera lástima, puesto que por lo general, los diputados del partido en el gobierno actúan según se les dicta desde el propio gobierno.

En el caso que nos ocupa, Manuela García Cázares es la beneficiaría de la “línea” del gobernador, línea que habrán de seguir de manera disciplinada y agachona, los diputados de de los tres partidos que apoyaron a Carreras en la campaña.

De acuerdo con el periodista Eduardo López Cruz que prepara el libro, “La Grilla”, diccionario de dichos y frases célebres en la política nacional, la “línea en la política mexicana, dar o recibir línea, es ordenar o cumplir una orden, dentro de una disciplina acrítica”, en tanto que “alinearse” significa: “Someterse los políticos incondicionalmente a sus superiores, con el objeto de mantener su puesto o lograr privilegios, mejor posición en la política o en la administración pública”.

Es decir, que los diputados oficialistas acaten la línea del gobernador, también les deja ganancias o lo que es lo mismo, todos ganan: gana el gobernador que pone a la magistrada que él quiere, gana la magistrada por el cargo que recibirá y ganan los diputados que como se sabe, no da paso sin huarache.

La línea surge en regímenes con instituciones débiles y una clase política corrupta que gusta de extender sus brazos a todo el andamiaje del poder y del Estado. Que el gobernador recurra a usos y costumbres que se tenían por caducas o en vías de extinción no deja de ser deplorable, pues su discurso acaba de chocar fatídicamente con los hechos.

 

Hoy el pleno de diputados vota y lo harán sin haber escuchado una sola palabra, sin haber atendido una sola idea o concepto de los tres candidatos a magistrados. Han de decir los diputados que para qué, si lo que cuenta es la línea.

Skip to content