Por Antonio González Vázquez
¿Y si de las elecciones de 2018 en la capital potosina resulta un alcalde Independiente y cuatro diputados locales Independientes?
Si así pudiera suceder, sería entonces señal inequívoca de que San Luis Potosí sí está cambiando y que el hartazgo hacia los partidos y la clase política local ha llegado a su límite.
¿Y si la gente se decide y ya no acepta despensas, tarjetas con dinero, materiales para la construcción, ofrecimientos de huesos en el poder y hasta un pedazo de tierra en el cementerio?
Si así llega a suceder, entonces será real el cambio que tanto urge para la ciudad y para un poder legislativo corrompido.
¿Y si pese a los consabidos intentos de fraude, amenazas, hostigamiento y guerra sucia, se da el caso que en la ciudad la gente vota mayoritariamente por los Independientes?
Pues será que habrán salido a votar todos los ciudadanos que están cansados de la dictadura de los partidos y de sus facciones y caciques que utilizan el servicio público más que para servir, para enriquecerse y llenarse de poder.
¿Y si acaso los partidos, en caso de verse vencidos en las urnas, no aceptan los resultados y llevan a la ciudad a la confrontación y a la violencia?
Pues sería que no habrán entendido el mensaje de la gente y que prefieren destruir en lugar con cooperar, como debe ser en una democracia, a que la gente viva mejor.
Ayer ante el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana, Xavier Nava Palacios presentó su voluntad de registro como aspirante a candidato a presidente municipal de San Luis Potosí.
El aún diputado federal externo por el PRD, sin mencionar para nada al Ayuntamiento de la capital que está bajo la “G” de Gallardo, ofreció algo que sería la antítesis del gobierno capitalino actual: un buen gobierno, un gobierno honesto, un gobierno respetuoso de la gente; un gobierno respetuoso de la ley. Vamos por un San Luis Digno, es lema y consigna.
Por el otro lado, la probable pretensión de reelección.
La dignidad en el discurso de su abuelo, Salvador Nava Martínez, era piedra de toque, era la palabra mágica que activaba la emoción de la gente.
Pero también expresó su voluntad de registro, el aspirante a candidato Independiente a Diputado Local por el VI Distrito con cabecera en la capital, Jesús Monsiváis Cerda, quien también ofreció comportarse con dignidad en la curul y de ayudar a rescatar a la institución que es la legislatura, ahora más desacreditada que nunca por los presuntos actos de corrupción cometidos por los miembros de la Ecuación Corrupta.
Habrá más candidatos Independientes para los distintos cargos de elección que estarán en juego el año entrante.
Tal vez no sea una solución definitiva, pero bien vale la pena probar algo distinto a la ya conocida, por corrompida, clase política partidista.
Como sea, imagínese el lector que en el 2018 la ciudad la ganan los Independientes. Entonces sí volvería a ser San Luis ejemplo de participación y lucha cívica, tal como sucedió la última vez allá por finales de 1991.
Puede ser: Gallardía contra Dignidad.