Por Victoriano Martínez
En este San Luis, deveras
difícil resulta hacer
unas cuantas calaveras
si tantas se pueden ver
Basta ver página roja
pa’ notar cómo la muerte
presente en cada hoja
demuestra que sigue fuerte
Ejecutados y abatidos
aún se cuentan por cientos
no valen nuevos partidos
que hablen de nuevos tiempos
La Muerte sigue en su fiesta
e inseguros todos viven
algo que poco le cuesta
tiene organizado al crimen
Por eso los personajes
buscan llamar la atención
con festejos y con pajes
y gastos sin parangón
Pero la Muerte implacable
nada les va a perdonar
por mucho que de ellos se hable
al panteón los va a llevar
Y vio a Ricardo Gallardo
arreglando Tangamangas
con presupuestos inflados
lo sepultó hasta las mangas
Por muchas obras que haya hecho
y ocurrencias hilarantes
la Parca sintió el derecho
de eliminarlo cuanto antes
Torneos de charrería
Xantolos y la Fenapo
de poco le serviría
la Muerte lo hizo un guiñapo
Galindo en su bicicleta
hizo con Nairo carrera
cual ciclista de probeta
ni la Muerte se lo crea
Alcalde anti-ciclovías
por Nairo pagó millones
así comienza él sus días
como los más gastalones
Lo que al pueblo le preocupa
lo tiene al él sin cuidado
la Muerte aún y sin lupa
lo tiene ya condenado
Aun siendo policía
Galindo mató a su oficio
con falta de ortografía
la propaganda es gran vicio
La Parca ante eso atenta
dijo “polisía” no existe
abrió un panteón a su cuenta
y todo inseguro y triste
De pronto los diputados
se hicieron notar de oficio
se dijeron apretados
y quieren nuevo edificio
La Muerte muy complaciente
dijo ¡inútiles, tienen razón!
más pronto que en caliente
les construyó su panteón
Y cual fantasma en pena
a Xavier Nava le salió
observación a su cuenta
y la Parca se alarmó
“¿Que no estaba sepultado
con la inhabilitación?
Si no pueden anularlo
¡mejor me lo llevo yo!”
Olga Regina discreta
no pasó inadvertida
y la Parca muy atenta
la vio algo sometida
“No le hagas caso a Gallardo
encabezas un Poder”,
le lanzó la Parca el dardo
“preferible perecer”.
De poco a ella le valió
afirmar que es respetada
la Muerte no le creyó
ahora ya está sepultada
Así un poco el panorama
de este San Luis olvidado
en el que el peor drama
es un pueblo resignado
La Parca está impresionada
por la apatía y sumisión
pues no le ha costado nada
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