Eduardo Delgado
Persiste la inconformidad de vecinos del fraccionamiento Los Lagos Residencial con la constructora e inmobiliaria Comebi, por la pésima calidad de las viviendas, falta agua, deficiencias en el drenaje e inseguridad, no obstante esa compañía prosigue con la venta de casas.
Este martes, un grupo de afectados protestó en las oficinas donde Comebi promociona y vende viviendas. En representación de los inconformes, Alejandra Macedo denunció también que el predio destinado por esa compañía para edificar un club deportivo “ya ésta en venta”.
Las moradas, aseveró, “están hechas con material bastante malo; si uno le pega sin querer a la pared, se cae un pedazo”. En las oficinas de Comebi les advirtieron que no deben instalar tinacos con mayor capacidad de almacenamiento “porque el techo se nos podría venir encima”.
En otro fraccionamiento promocionado como privado y dotado de casa club “las viviendas no tienen medidor de luz y muchos vecinos están con diablitos”, aseveró.
Recordó que cuando ella y su marido adquirieron su casa, como a todos los compradores, les entregaron un volante en el que se les anunció la construcción de un club deportivo. Pasado el tiempo reclamaron y entonces “sólo aplanaron la tierra para aplacarnos y siguen ofertando la venta de casas con ese discurso”, añadió.
Por si fuese poco, abundó, en el fraccionamiento hay una escuela primaria frente a la que pasa una avenida y por la que transitan coches a alta velocidad.
Para prevenir accidentes, señaló, “le pedimos (al encargado) que pusieran boyas y nos dijo que no, porque no se veía bien y para que eso no le desagradara a la gente que fuera a comprar”.
Comentó que a mediados de este año les anunciaron la construcción de una fosa séptica para resolver el problema del mal olor que emana de las coladeras de las casas en la madrugada. “Nos dijeron que en junio o julio ya no iba a oler y a la fecha sigue oliendo a caño”, expuso.
El responsable del proyecto habitacional en Villa de Pozos, Ricardo González Aldama, y personal de Comebi, dijo, “se burlan” de quienes acuden a quejarse, “pues nos dicen que somos muy pocos los inconformes y que no nos sabemos organizar”.
Desde el martes pasado, contó, “no tenemos agua o nos la mandan dos horas en la madrugada o en la noche”, porque supuestamente se descompuso la bomba del pozo. Ha sido un problema permanente y “no se resuelve; sólo nos dan excusas”.
Estimó que desde que comenzó la venta de casas, hace más de seis años, son más de dos mil los afectados en diferentes secciones del conjunto habitacional.
Cuando compraron sus casas, recordó, a todos les dijeron que no tenían cisternas porque “supuestamente siempre iba a ver agua y con mucha presión, porque el fraccionamiento tiene su propio pozo”.
Además, las suspensiones de energía eléctrica son frecuentes. “El lunes nos mandaron un aviso de que la Comisión Federal de Electricidad iba a hacer unos ajustes y eso es cada rato. Nos dejan sin luz hasta ocho horas y todo lo que tiene uno planeado te lo truncan”.
Ricardo González, comentó, les dio su número de teléfono para atender cualquier inconformidad “pero ya no lo contesta y su secretaria es súper déspota y grosera”, añadió.
Lamentó que los vecinos no se han juntado para demandar a esa compañía potosina, desarrolladora de proyectos habitacionales en Aguascalientes, Guanajuato, Querétaro, Sonora, Sinaloa, Chihuahua y Estado de México, como presume en su página en Internet.
Ello, explicó, porque “unos jalan y otros no”. La mayoría “hacen y deshacen a través de las redes sociales, pero a la hora de ir a protestar van muy pocos”.
Dijo haber confirmado que Comebi acumula bastantes demandas en otros fraccionamientos, por lo que “no es nuevo que estos zánganos sigan vendiendo sin cumplir lo prometido”.
Para finalizar, refirió que, debido a la falta de vigilancia, son constantes los robos. “La situación se ha calmado las últimas semanas, pero habido temporadas en que cada dos o tres días roban en una casa”.
