Yesenia Atziry Quiroz Alfaro, una de las cinco víctimas del multihomicidio en la colonia Narvarte, acababa de cumplir 16 años cuando dejó la casa de su mamá en Mexicali, Baja California, y viajó a la ciudad de México. En mayo de este año madre e hija se encontraron en Morelia, Michoacán, donde estuvieron un par de días.
Esa fue la última vez que Indira “N” vio con vida a su hija. La madrugada del 1 de agosto pasado, Indira estaba en su trabajo en Mexicali, Baja California, cuando recibió una solicitud de amistad en Facebook de La Chiquis, una amiga de su hija Yesenia de 18 años.
Apenas la aceptó, la joven le escribió para decirle que tomara el primer vuelo a la ciudad de México.
“Yesenia tuvo un accidente”, le puso La Chiquis.
A las 17:00 horas de ese mismo día, Indira arribó al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y se trasladó de inmediato a la Fiscalía de Homicidios de la Procuraduría capitalina.
De ahí la llevaron al anfiteatro de la coordinación Benito Juárez 1, donde identificó el cuerpo de Yesenia.
De acuerdo con sus declaraciones que forman parte del expediente FBJ/BJ-17T2/4379/15-07, su hija abandonó la casa a los 16 años para venir al Distrito Federal donde trabajaba como edecán, demostradora y maquillista.
La separación de sus padres, cuando Yesenia tenía apenas cuatro años, provocó que desde pequeña fuera independiente. A los 10 se fue a vivir con su padre y la nueva pareja de éste, pero cuatro años después regresó a casa de su madre, cuando se negó a continuar con sus estudios.
Según la mamá de Yesenia, su hija —la menor de tres hermanos y quien sólo tenía estudios de primaria— le llamaba por teléfono regularmente. Sabía que mantenía una relación con un hombre que era propietario de cremerías y se había puesto implantes en los glúteos a principios de este año.
“Era muy reservada con sus cosas respecto a lo que hacía y con quién convivía, pero siempre estaba en contacto conmigo por teléfono o Facebook”, declaró. “Pude ver a mi hija muy feliz, no me comentó nada de problemas, ella me decía que estaba muy contenta”.
Yesenia Quiroz, quien cumpliría 19 años en septiembre, llegó a vivir al departamento de la colonia Narvarte en septiembre de 2014. Ella llevó en junio de este año a vivir ahí a la colombiana Milé Virginia Martín, su amiga.
Los cadáveres de ellas dos son las que más lesiones presentaron. Los encargados del caso consideran que el ataque iba dirigido contra ambas, pero hasta el momento no se ha determinado por qué motivo.
El Universal