Antonio González Vázquez
Con motivo de la glosa del primer informe de Gobierno, mañana comparecen ante la legislatura los titulares de cuatro secretarías del ejecutivo.
El gobernador José Ricardo Gallardo Cardona ha reconocido que, en el Congreso del Estado, se siente como en su propia casa.
No se extrañe que sus colaboradores también se vayan a sentir como en casa al comparecer ante diputadas y diputados de comisiones.
La LXIII legislatura se ha mostrado sumisa al ejecutivo y este martes, no habría que esperar lo contrario.
A comparecer a las nueve de la mañana ante la comisión de Gobernación, el Secretario General de Gobierno, J. Guadalupe Torres Sánchez; al mediodía, el Secretario de Desarrollo Económico, Juan Carlos Valladares Eichelman, ante la comisión de Desarrollo Económico.
Por la tarde, el Secretario de Seguridad Pública del Estado, Guzmar Ángel González Castillo, ante la comisión de Seguridad Pública, Prevención y Reinserción Social y; la Secretaria de Desarrollo Urbano, Vivienda y Obras Públicas, Isabel Leticia Vargas Tinajero, ante la comisión de Desarrollo Territorial Sustentable.
Este primer bloque es de gran relevancia por las responsabilidades de esos servidores públicos en asuntos de primer orden en los que la administración estatal no ha cumplido con creces.
De manera especial por lo delicado del contexto, es el tema de la inseguridad en cuyo caso, la percepción ciudadana es negativa.
En los próximos días, el Secretariado Ejecutivo Nacional de Seguridad Pública dará a conocer el reporte mensual de incidencia delictiva del fuero común y será entonces cuando se cierren cifras oficiales del primer año de gobierno.
En once meses de la administración ya sumaban 573 ejecutados e iban 37 mil 143 denuncias por delitos del fuero común presentadas ante la Fiscalía General del Estado.
La percepción social de inseguridad es de 74.9 por ciento.
En ese tema, las y los diputados están obligados a cuestionar y exigir información precisa sobre el curso que lleva la estrategia de combate a la delincuencia. Tendrán que demandar la aportación de datos que expliquen las causas del inocultable hecho de que en San Luis Potosí se sigue viviendo con miedo.
Uno de los planteamientos necesarios que requieren respuesta, es el hecho de que 58.9 por ciento de la población considera que el principal problema del estado es la inseguridad.
Las y los legisladores no deberían aceptar respuestas elusivas o una diatriba mareadora, de ellas y ellos depende que la glosa no se convierta en un acto de propaganda oficial.
Algo que de suyo merece ser abordado a profundidad, es la presunta llegada a territorio potosino del Cartel Jalisco Nueva Generación que estaría peleándose la plaza con otras tres organizaciones del crimen.
Ese es un asunto muy relevante en el que deberán surgir las explicaciones pertinentes de porqué San Luis es territorio de carteles. ¿No que se había blindado al estado?
Otro tema nodal es el de la obra pública que, a no dudarlo, encierra grandes dudas respecto de la aplicación de los recursos públicos, así como en su asignación.
Las obras de infraestructura que tanto ha presumido la administración se han desarrollado en un entorno de opacidad y ocultamiento de la información, lo que ha derivado en falta de certeza sobre su costo real y los beneficiarios de la inversión.
El propio gobierno se ha encargado de profundizar las dudas al informar un costo al inicio y otro al final de cada obra.
Se trata de una administración cerrada herméticamente al escrutinio público.
El gobernador Gallardo Cardona se ha ufanado de que en este gobierno sí hay dinero, que nunca han dicho que no lo haya, sin embargo, no se tiene certeza sobre su ejercicio.
La titular de SEDUVOP tiene mucho que explicar y aclarar, pero no lo hará voluntariamente. Toca entonces a las y los diputados preguntar lo necesario para que la sociedad se entere de cómo se ha gastado cada peso en obras.
Para que la glosa del primer informe sea útil, se requiere en primer lugar, que las y los diputados tomen en serio su papel como representantes populares. Están ahí para preguntar de lo que la gente necesita saber.
Es fundamental que hagan preguntas puntuales en busca de datos y no de opiniones o comentarios simplistas. Deben ser perseverantes en el caso de que el funcionario no responda y tienen la obligación de exigir que se hable con verdad.
Lamentablemente la experiencia que resulta de ejercicios similares es decepcionante, pues por lo general impera la abulia y el desinterés, el ausentismo y, sobre todo, la ignorancia supina o de plano, el desconocimiento absoluto de los temas.
Eso, por una parte, pero por la otra, se impone la actitud oficiosa y aplaudidora de quienes únicamente participan para hacer preguntas a modo para que el servidor público se luzca.
Del talante que muestren las y los diputados en las comparecencias depende si se da una glosa efectiva o un acto más de simulación.
Si somos realistas, el escenario probable es que las y los funcionarios de Gallardo, al igual que el mandatario, en el Congreso del Estado, se sentirán como en casa.
Un ambiente de cortesía, sonrisas, abrazos y muchos, muchos aplausos: del sí señor gobernador, al sí señor Secretario, lo que usted diga.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.
Es Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí. Ha sido docente de la Facultad de Ciencias de la Comunicación durante 25 años. Además, durante 30 años se ha desempeñado como periodista en medios como El Heraldo, El Mañana de Ciudad Valles, Pulso, Milenio San Luis, Diario Digital San Luis, Librevía, La Jornada, Global Media y actualmente en Astrolabio Diario Digital y Periodismo Político.com. También ha sido corresponsal de medios nacionales como Agencia de noticias NOTIMEX, La Jornada y Milenio.
