Por Victoriano Martínez
Con lo que gana un diputado y los apoyos adicionales que recibe, ¿cree usted que requeriría de algún anticipo para alcanzar a llegar al fin de quincena?
La lógica y el sentido común dicen que no, pero si ocurre habrá de ser por una razón muy distinta a la insuficiencia salarial.
Tan sólo en los primeros seis meses de este año, el Congreso del Estado emitió 33 cheques para diputados con el concepto “anticipo de sueldo” o “anticipo de percepciones”, que suman en total un millón 243 mil 654.28 pesos.
A pesar de ser 33 anticipos, son solo cinco diputados quienes han recurrido a esta prestación.
El diputado Héctor Mendizábal Pérez recibió 16 anticipos que sumaron 579 mil 351.37 pesos en el primer semestre: uno en enero, cinco en febrero, cuatro en marzo, uno en abril, uno en mayo y cuatro en junio. El anticipo más alto lo recibió el 22 de junio por 171 mil 280 pesos.
Por el monto, le sigue la diputada Lucila Nava Piña, quien obtuvo seis anticipo por un acumulado de 322 mil 001.82 pesos: dos en marzo, uno en mayo y tres en el mes de junio. Su anticipo más alto fue por 175 mil pesos también el 22 de junio.
Con un solo anticipo, el diputado Sergio Desfassiux Cabello es el tercero con 162 mil pesos que le entregaron con el cheque número 68537, el pasado 9 de febrero.
El diputado Gerardo Limón Montelongo recibió ocho anticipos de sueldo que acumularon 145 mil 301.09 pesos: dos en febrero, dos en marzo, tres en mayo y una en junio. El anticipo más alto lo recibió el 5 de febrero por vía de transferencia bancaria.
El diputado Jorge Díaz Salinas aparece con dos anticipos que acumulan 35 mil pesos: uno por 20 mil pesos el siete de febrero y el otro por 15 mil pesos el 5 de marzo.
De las 33 entregas de anticipos, 31 fueron a través de cheque y las otras dos por vía de transferencia bancaria.
