Chilapa, Guerrero (21 de septiembre de 2016).- Unos 450 civiles armados de la Policía Comunitaria para La Paz y la Justicia se encuentran en dos entradas a la ciudad de Chilapa, sobre la carretera federal Tlapa-Chilpancingo.
El grupo se encuentra dividido en dos partes, unos se encuentran en la comunidad de los Ajos y otros en el crucero a Ayahualulco. Algunos tienen el rostro cubierto, portan pistolas, otros armas largas de bajo calibre, machetes y palos.
El grupo de civiles exigen que el Ejército y las corporaciones policiacas actúen para encontrar al señor Jerónimo Rosario Tecorral, de 65 años de edad, quien fue llevado contra su voluntad la tarde del sábado.
Los inconformes dan un plazo de 48 horas para que las autoridades de seguridad den resultados, de lo contrario amenazan con cerrar las carreteras y tomar los puestos de vigilancia de las corporaciones policiacas en Chilapa.
Por su parte, el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo, en entrevista, aseguró que la postura del gobierno del Estado “ es establecer con mucha claridad que las policías comunitarias son policías para su territorio, no para incursionar en asuntos que no les competen y de esa manera hemos sido muy claros con esta policía comunitaria, igual que la de Petaquillas y la de lugares circunvecinos que se han convertido en más problemas que en beneficios para la colectividad.
“El gobierno del estado tiene muy claro que saludamos a todas aquellas policías comunitarias que contemplen el respeto a la propia legislación existente y a las otras tenemos que orientar y, en su caso, también actuar con una gran determinación y firmeza; lo que nosotros no podemos permitir es que en el pretexto de decir soy policía comunitaria tengo que meterme a lugares en donde no debo.”
Fuente: Excélsior.