Ciudad de México (10 de agosto de 2016).- Los bloqueos de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) continuarán por tiempo indefinido hasta conseguir la abrogación de la reforma educativa, señaló el dirigente de la sección 7 de Chiapas, Adelfo Alejandro Gómez.
“La lucha continúa y seguiremos generalizando la lucha en todo el país para echar abajo esta reforma impulsada por los grupos empresariales. La lucha continúa, será larga y difícil, tendrá que continuar”, dijo en conferencia de prensa al término del primer foro hacia la Construcción del Proyecto de Educación Democrática.
En este primer encuentro se dio a conocer que habrá otros dos foros, uno en septiembre y otro en octubre, de camino al Congreso Nacional Educativo de la Coordinadora que se llevará a cabo en noviembre. La construcción de la ruta educativa, señaló Enrique Enríquez Ibarra de la sección 9 de la CNTE en la Ciudad de México, podría extenderse más allá de noviembre.
“La ruta educativa tiene que seguirse trabajando. Son dos rutas diferentes (la política de la abrogación de la reforma educativa y la educativa, de la construcción del modelo pedagógico) y creemos que la sociedad estará atenta. No habrá ningún problema, habrá empresarios que estén preocupados en perder sus ganancias. Hay una ruta educativa, construirla puede ir más allá de noviembre”, mencionó.
Con la presencia de líderes sindicalistas, simpatizantes del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), y representantes de organizaciones sociales, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) presentó su foro hacia la Construcción del Proyecto de Educación Democrática.
Aunque participaron 46 oradores en un foro de casi 10 horas que abordaron la temática del foro sobre la “evaluación educativa integral” pocas ponencias presentaron una propuesta concreta para construir una evaluación que sustituya a la que actualmente aplica la Secretaría de Educación Pública (SEP).
El Foro hacia la Construcción del Proyecto de Educación Democrática de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) arrancó con la demanda del magisterio disidente de respeto a la relación laboral “colectiva y bilateral”. El dirigente de la sección 18 de la CNTE en Michoacán, Víctor Manuel Zavala Hurtado, esperó que las conclusiones de este foro sean tomadas en cuenta por el gobierno federal para el nuevo modelo educativo; sin embargo, los rectores de la educación en el país, la Secretaría de Educación Pública y el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación no asistieron.
“Que podamos tener los resolutivos para que el gobierno sí los tome en cuenta, que no lo eche a la basura”, dijo el dirigente sindical.
Entre las propuestas de la CNTE para integrar al modelo educativo se encuentran la “democratización”
de la estructura y funcionamiento de las organizaciones educativas; leyes y normativas que se puedan modificar en cada estado; y el “respeto a la relación laboral y bilateral para fortalecer la justicia social”, dijo el líder de la sección 18, quien señaló que los maestros “vamos a lograr resultados atípicos”.
En la inauguración estuvieron presentes el padre Alejandro Solalinde, del albergue Hermanos en el camino; Melitón Ortega, de los padres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa; Víctor Enrique Favela, del Sindicato de Telefonistas; del Sindicato Mexicano de Electricistas, Fernando Muñoz; la ex diputada por el PRD Lorena Villavicencio Ayala; el sacerdote Miguel Concha Malo del Centro de Derechos Humanos “Fray Francisco de Vitoria” ; el presidente de Serapaz, Miguel Álvarez; la diputada federal por Morena, Araceli Damián González, los dirigentes de los sindicatos de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM), y del Instituto de Educación Media Superior de la Ciudad de México.
Durante las primeras siete horas de exposiciones, se tocó el tema del conflicto magisterial, los conflictos estudiantiles de 2014 y 2016 del Instituto Politécnico Nacional (IPN), se criticaron las propuestas para una reforma a la Educación Superior de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), los desaparecidos por la violencia en el país, los muertos de Nochixtlán y los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, Dios como maestro y las consecuencias de la reforma educativa. Sobraron las consignas y faltaron propuestas concretas para sustituir la evaluación docente o para integrar un nuevo modelo educativo, que era el propósito inicial del foro.
“Desde pequeño, mi padre y mi madre me inculcaron el amor a los maestros. Ni padre era maestro y mi mejor amigo, que es también mejor amigo de ustedes, también es maestro. Vivimos un momento difícil en México en este momento de crisis pero precisamente es importante plantearnos qué queremos en la Educación. Cuesta mucho trabajo encontrar líderes que puedan asumir las riendas de todas las responsabilidades nacionales. Nos tenemos que preguntar a dónde vamos con instituciones autoritarias, que en vez de educar están domesticando”, señaló el padre Solalinde.
Académicos universitarios asesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) encabezados por Hugo Aboites, Alberto Arnaut, Hugo Casanova y Antonia Candela plantearon que “con urgencia” se suspenda de manera inmediata todo el sistema de evaluación del desempeño docente y las consecuencias laborales y legales que ha tenido, para “restablecer un clima adecuado” para el trabajo educativo en las aulas.
“Insistimos en la necesidad de que se suspendan o dejen sin efecto todas las acciones punitivas que se han ejercido en contra del magisterio (…) y la urgencia de construir propuestas alternativas de evaluación con un carácter no punitivo”, señaló Hugo Casanova Cardiel en nombre de los asesores de la CNTE.
Para los académicos, de acuerdo con el documento que se presentó en el Foro de la CNTE para la construcción de un proyecto de Educación Democrática, la propuesta del gobierno federal sobre la reforma educativa ha resultado “claramente fallida” con problemas de aplicación, concepción y diseño de las políticas oficiales pues partió de un diagnóstico “limitado” de la problemática educativa en el país, ignoró la posibilidad de la participación de maestros y ciudadanos, y fue determinada por una “visión limitada y equivocada” de la evaluación.
En este sentido, señala que las evaluaciones docentes fueron operadas en “condiciones atentatorias de los derechos humanos” y con fallas técnicas “incluida la falta de validación externa para garantizar el logro de objetivos”.
Fuente: Informador.