CÓDIGO DE ÉTICA

Lineamientos

En el ejercicio de nuestra tarea diaria, nuestros principios y valores se traducen en los siguientes lineamientos, a título enunciativo más no exhaustivo:

Apego a la Verdad

Nuestro compromiso central con los lectores es aproximarles a la verdad, aproximarles a la realidad de su entorno; por eso, nos interesa lo que ocurre en las instituciones y en el poder público.

Nos esforzamos para escribir y publicar piezas informativas y artículos de opinión convencidos de que la credibilidad y el prestigio se construyen todos los días. Por eso, procuramos documentar lo que publicamos y presentar argumentos sólidos.

Optamos por la denuncia antes que aplaudir acciones que se limitan al cumplimiento del deber. No hacemos apología de las instituciones, gobernantes o servidores públicos, sino que los seguimos en su actuar opuesto a sus obligaciones para hacerlo notar porque sabemos ese es uno de los deberes de la prensa: ser guardianes del poder.

Sabemos que no es posible informar sin antes investigar con la inteligencia para luego escribir con creatividad; nos obligamos a conocer a fondo los temas y debatimos sobre el enfoque a seguir.

Estamos de acuerdo en que el apego a la verdad no debe ser una etiqueta publicitaria ni una frase de mercadotecnia, sino un principio sin el cual no se debe trabajar.

Creemos obligado evaluar lo que dice la fuente. Ninguna fuente tiene toda la verdad ni tiene todo el error. Adoptar una actitud de que lo que dice la fuente es lo que publico, aleja la verdad. Si se trata de un documento, se debe verificar su autenticidad y su autoridad.

Jamás debemos permitirnos pasar por ingenuos, somos escépticos por naturaleza, y cuando se trata del poder público, siempre tenemos dudas razonables acerca de sus hechos, de modo tal que no se nos da la actitud oficialista.

Independencia

Nuestro principal compromiso está con los lectores y, por tanto, no se acepta la injerencia de elementos extra periodísticos que pongan en riesgo la información.

Nuestro ejercicio periodístico no se mezcla con la venta de espacio informativo. Nuestras piezas informativas son completamente nuestra responsabilidad, bajo criterios estrictamente periodísticos y de ninguna manera se negocia con las fuentes nada que altere la independencia de acción. No se aceptan gacetillas (propaganda disfrazada de información periodística).

Nuestra relación con las fuentes es profesional y se evita cualquier compromiso que pudiera afectar el sentido periodístico de nuestro trabajo.

El respeto a nuestros lectores es similar al que le tenemos al oficio periodístico y, por tanto, al abordar los hechos, en su cobertura, análisis e interpretación, lo que impera es el interés del público y el interés periodístico de la información.

Responsabilidad

Nos esforzamos por hacer un buen periodismo, para lo que creemos necesario mantener los más elementales principios deontológicos de un medio de comunicación: honradez, responsabilidad social e independencia del poder público.

Trabajamos con la conciencia de que la prensa es un elemento fundamental que sostiene la democracia, es por ello que con responsabilidad nos ocupamos de denunciar todo aquello que atente contra ella, o bien, que la debilite.

Nos ocupamos de los actos de corrupción, de los excesos desde el poder público, la opacidad, el conflicto de interés, el dispendio de los recursos públicos, las violaciones al marco legal y el quebranto del Estado de Derecho.

Nos ocupamos de las violaciones a los derechos humanos, los fraudes electorales, la indebida procuración de justicia, la impunidad y todo tipo de arbitrariedad que cometen los servidores públicos y los entes privados.

  Integridad

Entendemos la sucesión de hechos como un proceso, por lo que reconocemos en el seguimiento informativo una forma de contribuir al entendimiento de nuestra realidad.

Nos proponemos, todos los días, explicar los hechos menester de un estilo informativo sereno y riguroso; el nuestro es un estilo narrativo que toma distancia de la objetividad, tan teórica como inexistente.

Reconocemos como instrumento para nuestro ejercicio periodístico el ejercicio del derecho de acceso a la información pública, con sus dos limitaciones –la información reservada y la confidencial–, ante las que somos conscientes de que su aplicación exige el sometimiento de los datos a las pruebas de daño y de interés público.

Libertad

Cada reportero de Astrolabio tiene libertad para construir un estilo propio en la redacción de sus textos, siempre que se respete el objetivo central de que sea la realidad la figura principal.

El estilo de redacción que nos distingue puede ser desenfadado, irreverente, irónico, sarcástico; pero también sereno, mesurado, enérgico, contundente; nunca estridente, alarmista o amarillista.

Estamos comprometidos a explorar a fondo los hechos, en su propio territorio, en su ambiente y de frente a los actores del suceso, es decir, que el reporteo se practica con responsabilidad y libertad.

Respeto

Se escribe con absoluto respeto al idioma y a las reglas del buen castellano, pero tampoco huimos a la claridad del lenguaje popular e incluso, barriobajero; lo que importa es decir las cosas como son.

Nuestra relación con las fuentes es de respeto. Acudimos a ellas por el carácter que tienen como poseedores de información que, por tener interés público, debe ser dada a conocer. Esperamos se nos reconozca nuestra postura como la del profesional que ejerce el derecho a la información, y más específicamente en derecho a la libertad de expresión.

Somos respetuosos de los derechos humanos, especialmente en la protección que merecen los grupos considerados vulnerables.

Asumimos que, al cubrir tragedias, es tanto más verdad la información cuanto más se apega a la compasión (sentir con). Sentir la historia con aquellos que la están padeciendo.

Reconocemos el derecho de réplica y asumimos el compromiso de rectificación oportuna.

  Eficiencia

Nuestros periodistas deben conocer todas las técnicas de la buena redacción y desarrollar a plenitud los distintos textos propios de los géneros de la información y de la opinión.

Cultivamos un estilo de redacción directo, claro, sencillo, versátil, fresco, atractivo por lo que no necesariamente nos sujetamos a la camisa de fuerza de la nota informativa: la creatividad está primero que la rutina.

Superación

Reconocemos que en el ejercicio periodístico, la ética y la técnica van de la mano. Cuanto más ético se busca ser, se está más obligado a utilizar mejor el aspecto técnico, porque la técnica está atravesada por lo ético. Es por ello que apuntamos la necesidad de la capacitación constante, sea por vías autodidactas o a través de participación en conferencias, cursos, seminarios y otros eventos de esa naturaleza.

El aprovechamiento de las nuevas tecnologías para mejorar el ejercicio del periodismo es constante, lo que exige adoptar una actitud abierta a la obtención de nuevos conocimientos, como una forma de rendir culto a los principios y valores para prestar un mejor servicio a la sociedad.