Por Victoriano Martínez
El saldo de las comparecencias con motivo del segundo informe de gobierno fue la ausencia de una auténtica rendición de cuentas, algunos chispazos sobre referencias al documento en revisión, pero, sobre todo, la exhibición de la poca voluntad por transparentar el ejercicio gubernamental y, lo que es peor, aparentar que sí lo hacen.
“La autoridad tanto estatal como federal nos obliga a tener transparencia en todos los padrones de beneficiarios”, aseguró Juan Ignacio Segura Morquecho, secretario de Desarrollo Social y Regional (SEDESORE), como si efectivamente cumpliera con esa obligación.
“De hecho, el (padrón) de beca alimentaria nosotros lo trasladamos a DIF para que ellos sean el ente encargado de subirlo. Nosotros lo hacemos con el de adulto mayor, madre soltera y lo hacemos en cuanto esté completa el de clínica rosa”, detalló en su comparecencia sobre la manera en que cumplen.
Así como el hecho de que estén a la vista las obras no es transparencia, tampoco lo es que un funcionario afirme en una comparecencia que la cumplen (02:05:00). Lo dicho por Segura Morquecho está muy lejos de lo que realmente hacen en la Plataforma Estatal de Transparencia (PET).
Si hay padrones de beneficiarios que la SEDESORE envía al DIF para ser publicados, más valdría que Segura Morquecho le haga algún reclamo a la presidenta de ese organismo porque en los primeros nueve meses de este año el envío de esa información ha sido en vano: no han publicado ninguna de las listas de beneficiarios de las becas alimentarias.
En lo que va del año, sólo en el mes de mayo el DIF ha cumplido con la fracción XX del artículo 84 de la Ley de Transparencia, pero no con una relación de beneficiarios de los programas sociales, ya que sólo aparecen 144 pacientes de rehabilitación, 231 que recibieron credenciales para rehabilitación y tres que recibieron sillas de ruedas.
Aunque en el formato de ese mes aparece el vínculo a un archivo Excel con la relación de beneficiarios de grupos prioritarios, el archivo no existe o fue borrado. En el caso de los otros ocho meses, el apartado correspondiente a esa fracción ni siquiera aparece.
En el caso del módulo de transparencia de la SEDESORE en la PET, no aparece ninguno de los padrones que Segura Morquecho afirmó que desde su dependencia se publicaban. O tiene que reclamarle a su Unidad de Transparencia, o mintió abiertamente porque aseguró que con padrones que se van alimentando cada mes “cuando hacemos corte en transparencia”.
“No podemos jugarle al vivo con un programa tan puro como son los de desarrollo social”, aseguró… pero lo hacen. Y lo hacen porque saben que pueden violar la Ley de Transparencia sin tener consecuencias por una Comisión Estatal de Garantía de Acceso a la Información Pública solapadora y encubridora.
Durante los primeros cinco meses del año, en lugar de los padrones de beneficiarios, la SEDESORE publicó un documento en PDF con el mismo contenido:
“ARTÍCULO 84 FRACCIÓN XX B
“En cumplimento al artículo 84 fracción XX B de la Ley de Transparencia de Acceso a la Información Pública vigente en el Estado de San Luis Potosí, se informa que la Secretaría de Desarrollo Social y Regional, en este periodo, no generó Padrón de Beneficiarios”.
Para el caso del formato correspondiente al mes de septiembre, ni siquiera existe vínculo a esa aclaración. Si en los primeros cinco meses del año, la SEDESORE “no generó padrón de beneficiarios”, ¿entonces a quiénes entregó las becas alimentarias, las de adultos mayores, las de madres solteras, y demás apoyos sociales?
En el mes de junio, la SEDESORE publicó una relación de 30 beneficiarios de un programa denominado “Cuarto Adicional” en Lagunillas en convenio con el INVIES; en julio publicó la lista de 70 beneficiarios del mismo programa en Xilitla; y en agosto 106 también del mismo programa, pero 30 en Moctezuma y 76 en Tampamolón.
Llama la atención que el único programa sobre el que dan a conocer la lista de beneficiarios está a cargo del recién desaparecido Instituto de Vivienda del Estado (INVIES) que también, según expuso Segura Morquecho, también era (¿es?) utilizado para detectar y determinar los beneficiarios de la entrega de tinacos y cisternas.
“Nosotros sólo somos financieros de este programa. Este programa fue operado por el INVIES, y sigue siendo operado por el INVIES, y sigue en desarrollo de entrega de cisternas”, dijo. Quizá no le han informado que el INVIES desapareció para dar paso al Instituto de Regularización y Vivienda Social (Inrevis), de lo contrario habría aclarado si este nuevo instituto seguirá con el programa.
Segura Morquecho afirmó que los tinacos se entregaban a domicilio ya instalados, lo que contrasta con las imágenes que el propio gobernador difundió en su página de Facebook.
La exhibición de fingida voluntad de transparencia para disimular la opacidad de su actuación protagonizada por Segura Morquecho representó un buen cierre de los tres días de comparecencias en los que la rendición de cuentas estuvo ausente.
