Abelardo Medellín
El regreso del uso obligatorio del cubrebocas que estableció la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) es una medida meramente preventiva y busca evitar la problemática del ausentismo que representa un nuevo reto para las instituciones en tiempos post pandemia, indicó el doctor Andreu Comas García, profesor e investigador del Centro de Investigación en Biomedicina y Ciencias de la Salud (CICSaB) de la UASLP.
El pasado viernes 8 de septiembre, la máxima casa de estudios informó que el cubrebocas volvería a ser obligatorio en espacios cerrados a partir del lunes 11 de septiembre; la medida fue seguida por la Benemérita y Centenaria Escuela Normal del Estado (Becene) desde este martes 12 de septiembre.
El doctor Comas García explicó que se busca mitigar una complicación post pandémica, como el ausentismo laboral y escolar por motivos de salud.
“Ha sido muy evidente en las universidades la cantidad de gente que está faltando o la cantidad de gente que está avisando que está enferma; no queremos volver a un estado virtual o híbrido”, comentó.
De acuerdo con el investigador, las universidades y los centros laborales han registrado un nuevo comportamiento en el que la gente solicita quedarse en casa cuando está enferma, situación que provoca alto ausentismo. Ante dicho problema, la UASLP tomó la decisión de promover el uso obligatorio de cubrebocas para que, quien tenga síntomas, pueda asistir, pero evite contagiar a otros, y al mismo tiempo se normalice una medida preventiva necesaria.
“Tenemos que entrar a esta nueva cultura, por ejemplo, en Asia tienen desde hace mucho tiempo la cultura de: si yo no me quiero enfermar, soy de alto riesgo y voy a estar en un lugar con muchas personas, pues uso cubrebocas, o si yo pudiera estar enfermo, pero no puedo faltar, uso el cubrebocas; es decir: si yo soy de alto riesgo, busco protegerme y si yo puedo contagiar, busco proteger a otros”, explicó.
Aunque el investigador explicó que esta es una medida necesaria para evitar el ausentismo que podría surgir en espacios laborales y académicos, aclaró que cada espacio, institución y centro de trabajo deberá analizar y promover sus propias estrategias para evitar contagios y la inasistencia por motivos de salud.
Indicó que actualmente San Luis Potosí podría pasar por una “séptima ola de menor tamaño” a las de años anteriores, pero sería difícil confirmarlo, pues muchos de los datos sobre el número de casos de covid-19 están subregistrados.
“Tenemos un gran subregistro, porque hoy mucha gente, o no se hace la prueba o se hacen, por ejemplo, las pruebas compradas en cualquier farmacia y son positivos, pero no se notifica eso, entonces hay que buscar otra manera de tener esa métrica de la pandemia”, afirmó.
El investigador comentó que, de cara a la temporada decembrina, se espera que el comportamiento de infecciones respiratorias sea similar al de diciembre de 2022, es decir, se registrarán picos de covid-19, pero también de influenza y de virus respiratorios.
Ante el aumento de casos y la resistencia de algunas autoridades a registrar debidamente las cifras de contagios, el doctor apuntó una última idea sobre el tipo de comportamiento colectivo que la población debe adoptar:
“Hay una palabra que me gustó que se dijo en la OMS (Organización Mundial de la Salud) es sociabilidad. ¿Qué quiere decir eso? Esto es pensar en el beneficio de los demás y no en el beneficio propio, es decir, si yo uso el cubrebocas no es a lo mejor para protegerme a mí, es para proteger a otras personas”.