Puebla.- El novio de Paulina Camargo, la joven que desapareció en la noche del martes 25 de agosto con 18 semanas de embarazo, terminó por confesar que la asesinó en su domicilio, estrangulándola, porque no quería asumir la responsabilidad de ser padre.
De acuerdo con la confesión de José María Sosa Álvarez, originario de San Andrés Tuxtla, Veracruz, quien estudia Ingeniería Mecatrónica en la Universidad del Valle de México, campus Puebla, depositó el cadáver en bolsas de basura y la fue a tirar en un contenedor en la unidad habitacional La Margarita.
Por este feminicidio, el joven de 20 años ingresó al penal de San Miguel en la noche de este sábado, y podría alcanzar hasta 60 años de prisión por este delito.
Tras su confesión, elementos de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) se trasladaron al lugar para realizar las labores de levantamiento de cadáver, aunque otro grupo se trasladó al relleno sanitario debido a que suponen que los restos podrían ya estar en esa zona.
Los padres de la víctima, María del Rocío Limón y Rolando Camargo, confirmaron que “Chema” mató a su hija el mismo martes 25 en su departamento en la unidad habitacional La Margarita.
Cabe citar que con este caso, suman tres hechos similares registrados en Puebla de padres primerizos que terminaron por asesinar a sus parejas por no querer asumir una responsabilidad.
