Desiree Madrid
San Luis Potosí enfrenta una crisis de movilidad que el Gobierno del Estado insiste en resolver con la construcción de puentes vehiculares, sin embargo, colectivos ciudadanos y expertos en movilidad advierten que esta estrategia no solo es ineficaz a largo plazo, sino que también contradice normativas vigentes.
Víctor Hernández, líder del colectivo Pedaleando SLP, ha cuestionado la falta de un enfoque integral y la persistencia en infraestructuras que favorecen exclusivamente al automóvil.
“Siguen apostando por puentes vehiculares como si fueran la gran solución, cuando en realidad solo perpetúan el problema”, señala.
De acuerdo con Hernández, está demostrado que este tipo de infraestructuras no reducen el tráfico a largo plazo, pues “solo fomenta más uso del automóvil y deja fuera soluciones realmente eficientes”.
La lógica detrás de estos proyectos ignora un principio ampliamente documentado en urbanismo: a mayor infraestructura para automóviles, mayor número de autos en circulación, lo que termina agravando el problema que se pretendía solucionar.
El activista también destaca que esta política contradice la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial, que establece una jerarquía de movilidad en la que peatones, ciclistas y transporte público deben ser prioridad.
“Lo peor es que esto va en contra de la normativa vigente. La Ley es clara: la infraestructura debe priorizar a peatones, ciclistas y transporte público antes que a los coches y aquí están haciendo exactamente lo contrario”, enfatiza.
Para Hernández, lo más preocupante es que estos proyectos carecen de estudios serios que evalúen alternativas más eficientes.
“¿Cuál es la justificación para gastar tanto dinero en esto? ¿El tráfico? ¿Se hicieron estudios serios para evaluar alternativas más eficientes? Claro que no”, afirmó.
Desde su perspectiva, la administración estatal aún opera bajo una visión anticuada que solo mide el número de autos que transitan, sin analizar cómo se mueven realmente las personas.
“Seguimos con la misma visión de hace décadas, donde el único dato que les importa es cuántos coches pasan, pero no cómo se mueve realmente la gente”.
Esta falta de planeación se agrava por la ausencia de personal capacitado dentro del gobierno que entienda de movilidad sostenible.
“El problema de fondo es aún más grave: no hay dependencias capacitadas para atender estos temas, ni personal dentro de la estructura gubernamental que realmente entienda de movilidad sostenible”, denuncia.
En lugar de invertir en infraestructura que promueve el uso del automóvil, Hernández planteó soluciones más sostenibles y efectivas.
“Si de verdad quisieran reducir la congestión, deberían invertir en transporte público eficiente con carriles exclusivos, mejorar la infraestructura peatonal y ciclista”, señala.
A pesar de los avances en la legislación, la práctica gubernamental aún favorece políticas del siglo pasado “en lugar de apostar por una movilidad segura, accesible y sostenible para todos”.
El debate sobre la movilidad en San Luis Potosí está lejos de terminar. Mientras las autoridades insisten en obras costosas que benefician al automóvil, activistas y ciudadanos continúan exigiendo políticas que realmente transformen la movilidad de la ciudad en beneficio de todas las personas, no solo de quienes se trasladan en vehículo particular.