Carlos Rubio
Desde enero debió comenzar la construcción del Centro Deportivo Santa Fe, la gran apuesta de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) por desarrollar su terreno de 46 mil metros cuadrados que lleva desocupado más de 20 años, sin embargo, actualmente, el sitio sigue en completo abandono, lo que significa un incumplimiento más al polémico contrato que firmó la institución hace casi un año.
El anexo tres del contrato celebrado con la empresa Distribuidora VEM, S.A. de C.V., que consiste en el cronograma de obra del “Centro Deportivo Santa Fe”, detalla por mes las actividades que la arrendataria debió realizar durante el año de gracia que la UASLP le otorgó para preparar estudios y permisos sin tener que pagar la renta.
De acuerdo con el cronograma, en el mes número nueve del año de gracia, es decir, en enero, debió comenzar la construcción de los estacionamientos y, para febrero, las obras de las canchas deportivas; no obstante, en una revisión aérea realizada por Astrolabio, se pudo constatar que, para este mes de marzo, aún no hay maquinaria ni ningún otro movimiento en el lugar.
Únicamente, en diciembre, se registró la presencia de una retroexcavadora que aparentemente retiró pastizal y allanó el camino que rodea parte del terreno que es utilizado por la BMW como estacionamiento, sin que haya habido otro tipo de trabajo en la zona.
Asimismo, para este mes la empresa se comprometió a tener listos los estudios preliminares, topográficos, de mecánica de suelos, un análisis urbano, el cálculo estructural, las tomas de agua, la factibilidad eléctrica y el proyecto general de todos los espacios previstos: estacionamientos, canchas deportivas, comercio y gimnasio.
Para septiembre de este 2025 los estacionamientos deberían entrar en operación, mientras que las canchas deportivas deberían estar listas para utilizarse en marzo de 2026; el gimnasio para mayo de 2027 y, por último, los espacios comerciales para agosto del mismo año, todo de acuerdo al cronograma establecido.
En su última declaración, el rector Alejandro Zermeño Guerra afirmó que la empresa cuenta con un año de gracia para cumplir con los compromisos establecidos y, hasta que este venza, será cuando la UASLP tome una decisión sobre el futuro del contrato.
Sin embargo, con una simple vista al cronograma es posible constatar que dichos compromisos establecidos en el contrato fueron incumplidos por la empresa, a falta de poco más de un mes para que se cumpla con el año de gracia establecido desde la firma el 12 de abril de 2024.
Lo que parecía una nueva esperanza de la UASLP por conseguir recursos y, además, obtener el aparente desarrollo gratuito de instalaciones deportivas para sus estudiantes, terminó por convertirse en un entramado legal que ha puesto en jaque a sus altos funcionarios como Zermeño Guerra y el secretario general, Federico Garza Herrera, así como a los miembros de la Comisión de Hacienda, presidida por el director de la Facultad de Derecho, Germán Pedroza Gaitán, e incluso el ex abogado general de la institución, Martín Joel González de Anda, cuya firma quedó plasmada en el polémico contrato, junto a la de Fabián Espinosa Díaz de León y Héctor José Valle Martín, representantes de la empresa.
Desde noviembre, cuando Astrolabio reveló que el proyecto sería principalmente un centro comercial y no un centro deportivo, la UASLP no ha aclarado en quién recae la responsabilidad de haber firmado un contrato que a todas luces es desventajoso para la institución, ya que ni si quiera tiene establecida una cláusula de rescisión en caso de incumplimiento, únicamente prevé la terminación anticipada mediante un convenio signado por ambas partes.
Además, la renta que presuntamente beneficiaría a la UASLP, es 30 veces menor a la que debería pagarse por un terreno de dichas dimensiones localizado en Lomas Cuarta Sección.