Carlos Rubio
Se llevó a cabo una plática informativa acerca del nuevo tipo de coronavirus (2019-nCoV), detectado el 31 de diciembre de 2019 en China. En el Centro de Investigación en Ciencias de la Salud y Biomedicina de la UASLP se contó con la participación de los doctores Daniel Noyola Cherpitel, Andreu Comas García y Alejandro Gómez Gómez, todos pertenecientes a la Facultad de Medicina.
En la plática se ofreció un panorama de lo que podría esperar México en caso de que se comiencen a detectar casos; los doctores concluyeron en que la llegada del virus a San Luis Potosí podría darse por medio de las empresas que operan en la Zona Industrial. Además, una ventaja que se tiene es que se deben seguir las mismas indicaciones preventivas que en 2009, cuando surgió el brote de influenza AH1N1: evitar contacto con personas enfermas, protegerse al toser, lavarse las manos y no tocarse la cara después de haber estado en contacto con objetos en la vía pública.
“Lo mejor es estar informados porque nos tocan muchos pacientes que llegan aterrorizados (…) Es una gran diferencia a hace diez años, hoy se tienen algoritmos, aquí en el estado ya hay hospitales que se están preparando (…) se están siguiendo los lineamientos de la OMS (Organización Mundial de la Salud)”.
Destacaron los avances tecnológicos actuales, los cuales facilitan la identificación de las posibles personas que hayan tenido contacto con alguien infectado, como en el caso del ciudadano infectado que provenía de Wuhan, China, quien estuvo de paseo por la Ciudad de México. “Esta forma de globalización es perjudicial para la transmisión (del coronavirus), pero a la vez benéfica en el sentido de la cooperación (entre países)”.
Se informó que de los aeropuertos de donde llegan vuelos directos de Francia y Japón pudieran entrar al país los primeros casos de coronavirus, dichos aeropuertos se encuentran en Cancún, Puerto Vallarta y la Ciudad de México. También se encontrarían vulnerables las ciudades de la frontera norte de México, especialmente las que se encuentran cerca de Arizona y de California, ciudades de Estados Unidos.
Por ahora la definición que se la da a un caso sospechoso de enfermedad por coronavirus (2019-nCoV) es:
Persona de cualquier edad que presente enfermedad respiratoria aguda y que cuente con el antecedente de viaje o estancia a la provincia de Hubei, China o haber estado en contacto con un caso confirmado o bajo investigación hasta 14 días antes del inicio de síntomas.
Dicha definición, según la opinión de los doctores, aún es un poco vaga y está sujeta a cambios de acuerdo a cómo se extienda el virus en los próximos días. Hasta el día de hoy, martes 4 de febrero, se registran 20 mil 701 casos confirmados en 27 países, con 472 muertes y 726 personas recuperadas.
De todos los casos, casi el 99 por ciento se encuentra en China Continental y sólo se han presentado dos muertes fuera de este país (en Filipinas y en Hong Kong).
Según los especialistas, la mayoría de los pacientes contagiados por este virus presentan síntomas leves y sólo el 25 por ciento amerita hospitalización. Sin embargo, las estrategias de China son agresivas debido a que se está tratando de contener el virus en un país que cuenta con más de mil 395 millones de habitantes.
También se comparó esta nueva enfermedad con el SARS, en el año 2002 en China, y el MERS, del 2012 en Arabia Saudita; ambos pertenecen a la familia de coronavirus y presentan síntomas similares, como neumonía, tos, fiebre, disnea (dificultad para respirar). El SARS tuvo una letalidad de 10 por ciento, y el MERS de 35 por ciento, mientras que hasta el momento el nuevo coronavirus tiene una letalidad de .5 por ciento.