Por Victoriano Martínez
Diversos grupos y corrientes de la comunidad de San Juan de Guadalupe y sus anexos Tierra Blanca y San Miguelito formaron un movimiento amplio para oponerse al sometimiento de sus autoridades comunales a la empresa inmobiliaria Espacios en el Horizonte y a pactos para construir la Vía Alterna entre el gobierno estatal y fraccionadores que buscan apropiarse de la Sierra de San Miguelito.
Los comuneros comenzaron contactos con instancias federales para buscar apoyo para asumirse como auténticos beneficiarios de sus tierras, y no caer en juegos y chantajes de fraccionadores que, como ejemplo, mencionaron que fueron los empresarios, y no el gobierno estatal, quienes pagaron las indemnizaciones de convenio para liberar el Boulevard Antonio Rocha Cordero.
Los comuneros fueron convocados para este domingo a una asamblea en la que se tratarán, entre otros puntos, el estatus del decreto de Área Natural Protegida en seguimiento a la reunión con empresarios en la que acordaron buscar anularlo, y un informe relacionado con el convenio que liberó el Boulevard Antonio Rocha Cordero y permitió concluir el puente frente a la Fenapo.
Los comuneros de distintas corrientes agrupados en este nuevo movimiento amplio advirtieron en un comunicado que los empresarios ahora pretenden una nueva negociación sobre el Boulevard Rocha Cordero, hoy señalado como Circuito Potosí, para chantajearlos “bajo el argumento de que el pago de ese adeudo es por gestión y recursos de los empresarios inmobiliarios”.
“Es decir, un adeudo de Gobierno del Estado pagado por empresarios que condicionan ese dinero a cambio de apoderarse de nuestro patrimonio”, señalaron.
Los comuneros cuentan con pruebas de que no fue el gobierno estatal el que pagó el adeudo de la indemnización por los terrenos del Circuito Potosí, sino los empresarios, y como una muestra presentaron la copia de uno de los cheques pagados desde una cuenta de la empresa Servicios Profesionales y Técnicos GAMO, S.A. de C.V.
Aseguraron que, después de que el presidente Andrés Manuel López Obrador estableció retirar el financiamiento para continuar la construcción de la Vía Alterna tras enterarse sobre el daño que provocaría a la Sierra de San Miguelito, los fraccionadores ahora pretenden recuperarla con un megaproyecto vial e industrial.
“De forma grotesca se ponen la casaca progresista, atreviéndose a presentarle a Claudia Sheinbaum el megaproyecto urbano vial e industrial, que además de abarcar la Vía Alterna, involucra en dos extremos la interconexión con Minera México en el Poniente y en el otro lado el proyecto industrial hasta hoy frenado por los ejidatarios en lucha de La Pila”, expusieron.
“Es muy grave que el Gobierno Estatal acuerde con los fraccionadores la construcción de la Vía Alterna, pasando por encima de nuestra comunidad y cayendo en el juego y chantaje de quienes buscan apropiarse de la Sierra”, advirtieron.
Los comuneros de distintas corrientes hoy unidos en un mismo movimiento consideraron que la convocatoria a la asamblea de este domingo forman parte del chantaje y la presión los grupos empresariales para manipular los “temas con el objetivo de imponernos decisiones autoritarias”.
“A todo esto, los que menos cuentan son las comuneras, los comuneros y sus familias, pues para los empresarios y sus aliados en el Gobierno, no merecemos la tierra que nos fue entregada por Resolución Presidencial en el año 1953, comentaron.
En su comunicado explican que han decidido conformar un amplio movimiento con tres grandes ejes como sus objetivos:
“1.- Destituir a quienes se dicen Mesa del Comisariado de Bienes Comunales y Consejo de Vigilancia, hoy representados “por el tristemente célebre Andrés Jesús Cruz Campos”, quien es heredero de la tradición usurpadora conocida como los “Juanes Perreros”.
“2.- Romper el sometimiento hacia los empresarios de la empresa Espacios en el Horizonte S.A. de C.V., quienes han utilizado todo tipo de maniobras para imponernos un modelo de apropiación de tierras para su beneficio propio.
“3.- Discutir, analizar y acordar con el Gobierno Federal como ser auténticos beneficiarios de nuestras tierras, estableciendo un esquema de desarrollo que no destruya el medio ambiente y nuestros acuíferos”.