Por: Oswaldo Ríos. Twitter: @OSWALDORIOSM
- Un virus asesino
El coronavirus se llama así porque su apariencia microscópica es la de un virus con una corona y sí, es el rey de la devastación. Provoca neumonía con síntomas como fiebre muy alta, tos intensa seca, dolor de cabeza y problemas para respirar. El patógeno 2019-nCoV ha matado a 305 personas (todas, menos una, en China) y ha infectado a 15 mil personas en ese país, pero se calcula que debe haber por lo menos otras 20,000 personas contagiadas sin diagnóstico. Como consecuencia, se han suspendido las conglomeraciones como bodas y por disposición legal, los cuerpos de las personas que fallecen son incinerados para prevenir contagios. Además, ya se presentó la primera muerte fuera de China, (un hombre en Filipinas) y se tienen reportes de unos 200 casos en dos docenas de países. La Organización Mundial de la Salud ha declarado emergencia internacional. El golpe a la economía china ha sido considerable, al punto que el banco central ha decidido inyectar 1.2 billones de yuanes (173 mil 800 millones de dólares) para garantizar liquidez y apoyar a las empresas en apuros. ¿Se imagina si este virus logra llegar a un país con un gobierno incompetente y desorganizado, con su sistema de salud colapsado, que tiene desabasto de medicamentos, sin dinero para gastos catastróficos y con una economía en recesión, es decir, México? Pues no quiero alarmarlo, pero ese escenario es posible. Uber fue más eficaz que los protocolos de salud del gobierno de López Obrador y detectaron a un usuario chino enfermo de coronavirus que utilizó sus servicios y para prevenir desactivó la cuenta de los conductores que tuvieron contacto con él, así como los usuarios que utilizaron ese vehículo después. El tiempo de incubación del virus es de 3 a 7 días, así que a rezar para que nadie que haya tenido contacto con el portador del virus lo haya contraído.
- Una bomba de humo
“Nos cayó como una bomba”, dijo el diputado priísta Mauricio Ramírez Konishi, sobre la renuncia de Jorge Vera como Fiscal Especializado en Hechos de Corrupción. Suponiendo que haya sido una bomba, fue de humo, porque era una renuncia que el propio interesado había filtrado desde hace por lo menos dos meses y tiene que ver con inconformidad con sus condiciones de trabajo, su personalidad (esta es la segunda vez que renuncia a un cargo de fiscalización, antes lo hizo a la Contraloría Interna del ayuntamiento con Victoria Labastida) y no por la supuesta falta de apoyo para convertir su agencia en el “brazo de hierro” de la Fiscalía. Como sea, la salida es el tiro de gracia al Sistema Estatal Anticorrupción que, en San Luis Potosí, simplemente no funciona. La atención se concentrará en la terna que presentará el gobernador Juan Manuel Carreras y una vez que lo haga, el Congreso tendrá 30 días para elegir. La votación requerida es mayoría calificada.
- La Voz San Luis
El próximo viernes 7 de febrero se llevará a cabo el foro ciudadano para la reforma electoral que organiza el Congreso en la capital del estado. Será ocasión para la catarsis pública de diferentes protagonismos políticos a nivel local, pero ojo, no debe perderse de vista que las organizaciones “ciudadanas” (auspiciadas por Nava y Gallardo) estarán deseosas de escenario para monopolizar el micrófono y mostrar sus dotes redentoristas. Algo así como “La Voz San Luis”, pero en pinche.
- Mirreyes en aprietos
La inocente declaración del secretario del ayuntamiento capitalino (el no abogado) Sebastián Pérez de que ojalá fructifique el juicio político que el gobierno municipal promovió en contra de Ricardo Gallardo, provocó lágrimas de risa y exclamaciones de “¡ternurita!” en varios diputados. La razón: el juicio político que presentaron es tan endeble jurídicamente que parece que lo hizo él, ya ni porque pagaron varios millones de pesos porque se los hicieran. El que apuestan que sí será procedente es uno promovido en contra del ayuntamiento capitalino por una torpeza en la que no se embarraron, sino que se batieron pisoteando la Constitución. ¡Ay mirreyes y mirreynas de petatiux, todo fuera como ponerse hasta el culo con “bacacho”, gritando rolas de Luis Miguel en un antro de mala muerte!
Comienza el día cero y mañana su continuidad.