Por: Eduardo Delgado.
Con el argumento de que le hicieron perder una oportunidad de trabajo en Guanajuato, Rodolfo Ariel Acevedo Oliva, ex director del Museo del Ferrocarril les imputó el delito de calumnia a extrabajadoras de ese recinto que lo acusan de hostigamiento sexual, pero cuya demanda permanece estancada en la Procuraduría General de Justicia del Estado.
En su reciente comparecencia con el Ministerio Público, Manuel Sandate Rodríguez, las ex empleadas, que acusan al ex directivo de acoso sexual, fueron advertidas también de que el Código Penal de aquella entidad sanciona ese conducta delictiva con dos a tres años de cárcel.
Por ende el representante social las “conminó” a llegar a un acuerdo conciliatorio, cesando los insultos contra Acevedo Oliva o de lo contrario proseguirá con la integración del expediente “y a ver qué resultados tiene”.
Les expuso que como pruebas de los infundios que han vertido en perjuicio del ex funcionario este presentó “artículos periodísticos” y copias de las capturas de pantalla del perfil de Facebook de una.
Toda vez que en San Luis Potosí la difamación no ésta tipificada como una conducta delictiva, el ex funcionario arguyó que el descrédito proferido por sus exsubordinadas le privó de la oportunidad de trabajo en el Gobierno del Estado de Guanajuato.
Hace cinco años las extrabajadoras fueron persuadidas de no presentar la demanda penal contra Acevedo Oliva, acerca de las propuestas sexuales que les hacía, con el argumento de que de hacerlo no lograrían su reinstalación en el museo.
Las víctimas refirieron que el ex director les insinuaba su deseo de sostener relaciones sexuales y les proponía: “Si te acuestas conmigo te consigo una base en Gobierno del Estado”.
