Por Victoriano Martínez
Hoy es día de San Luis Rey, el máximo día de feria, de no ser por la pandemia.
Por segundo año consecutivo, a la Feria Nacional Potosina la atacó el COVID-19 y, de no ser por los Servicios de Salud en el Estado (¡!), el Patronato para la Organización, Difusión y Administración de la FENAPO habría muerto de inanición.
La información disponible sobre los últimos años que se realizó, el Patronado de la FENAPO era más bien un organismo con algo de obesidad: consumía más de lo que producía.
En 2016, la FENAPO tuvo ingresos por 60 millones 256 mil 526 pesos y gastos por 74 millones 624 mil 574 pesos. Una pérdida de 14 millones 368 mil 48 pesos.
En 2017, sus ingresos fueron por 63 millones 180 mil 78 pesos, pero gastó 68 millones 171 mil 312 pesos. La pérdida fue de 5 millones 70 mil 332 pesos.
En 2018 sólo se informó que fue todo un éxito, pero no se dio a conocer públicamente el balance económico. En la página de transparencia del Patronato aún se mantiene el aviso de que la información está “en proceso de actualización en virtud de la nueva creación de este Patronato”.
Si tuvo pérdidas o no, no se supo. Algo similar pasó en 2019, cuando contó con un presupuesto de 71 millones 377 mil 74.95 pesos.
Para 2020 y 2021, el Patronato de la FENAPO previó gastos como en sus mejores tiempos: 76 millones 839 mil 571.42 pesos para el primer caso y 71 millones 625 mil 523.25 pesos para el segundo.
Tal consumo de recursos no se dio el año pasado… y este tampoco.
Hace un año, en el día que normalmente acude más gente a las instalaciones de la FENAPO, solo hubo una visitante que recibía atención por parte del personal médico de los Servicios de Salud en la Unidad Centinela ahí habilitada.
El Patronato de la FENAPO está muy lejos de ejercer un presupuesto de más de 71 millones de pesos.
No hay Feria, pero sí gastos. En el primer semestre de este año, el Patronato ha gastado 5 millones 592 mil 663.33 pesos prácticamente en algunas labores de mantenimiento, pago de servicios e impuestos y, no podía faltar, en nómina.
El pago de nómina está muy lejos de lo previsto para cuando sí hay Feria, presupuestado en 15 millones 23 mil 927.47 pesos. A la mitad del año, se ha pagado una nómina por un millón 889 mil 980 pesos, y finiquitos en marzo por 809 mil 532.20 pesos.
Aunque en el sitio Web de la FENAPO (https://fenapo.mx/) aún aparece la información sobre los preparativos de la edición 2020, el pasado 22 de junio el Patronato pagó 16 mil 636.06 pesos por la renovación de servicio de host cloud 2c por 1 año (del 27 de junio de 2021 al 26 de junio de 2020) y renovación dominio del 24 de junio de 2021 al 23 de junio de 2022.
De acuerdo con el decreto que crea el Patronato, la FENAPO “es un evento de la mayor relevancia para el Estado de San Luis Potosí, puesto que constituye el foro en el que convergen los principales actores de la sociedad, a fin de mostrar al país y al mundo el quehacer cotidiano en el ámbito industrial, comercial, agropecuario, turístico, cultural, deportivo y recreativo”.
En 2020 es posible que la imprevista llegada de la pandemia haya tomado por sorpresa al Patronato y no contara con plan B para el caso de la suspensión del evento que es su razón de ser.
Para este año, y por tratarse de un evento de la mayor relevancia, el gasto en la renovación del servicio de host cloud 2c y del dominio, bien pudieron ser para más que mantener el sitio como hace 20 meses.
Si la pandemia obligó a todo mundo a privilegiar quedarse en casa y muchas actividades se trasladaron al ciberespacio, ¿porque el Patronato de la FENAPO no pudo generar alternativas a través de ese medio para que no pasara inadvertida la que en sus más recientes ediciones se anunció como la mejor fiesta del verano?
Tal vez no lograría el mismo nivel de ingresos, pero al menos el Patronato mostraría que el COVID-19 no lo redujo a un mero administrador de un gigantesco inmueble con sólo tres fuentes de ingresos:
Operadora de Sites Mexicanos S.A. DE C.V. con 381 mil 626.33 pasos, la organización del Tianguis del Automóvil A.C. con 121 mil 896.54 pesos, y los Servicios de Salud –su salvación– con 9 millones 237 mil 213.69 pesos.
De no ser porque en sus instalaciones se habilitó una Unidad Centinela para atender la emergencia sanitaria, al Patronato difícilmente le habría alcanzado para los gastos que reporta durante este primer semestre.
Los Servicios de Salud prácticamente evitaron la muerte por COVID-19 del Patronato, pero no lograron que el enfermo tuviera capacidad para atender la obligación que le marca el artículo 3º de su decreto de creación:
“El Objeto del Patronato es la planeación, organización, puesta en marcha, administración, evaluación, y rendición de cuentas de todos los eventos de la FENAPO, bajo los principios de eficiencia, eficacia, honradez, economía, transparencia y responsabilidad presupuestal”.
La mayor secuela que le ha dejado al Patronado el COVID-19 es que de su razón de ser, el evento de la mayor relevancia, ya sólo queda un recuerdo porque no tuvo capacidad para adaptarse a la nueva realidad y encontrar vías de expresión que lo hicieran hacerse presente conforme a las nuevas circunstancias.
Hoy la FENAPO no es un referente de la mejor fiesta del verano, sino de un lugar más al que se puede acudir para recibir atención por COVID-19.
