Ciudad de México (19 de agosto de 2016).- Por años el mensaje fue: “hay que beber dos litros de agua al día”. Lo decían médicos (todavía hoy, en la televisión y en las revistas lo hacen) y modelos y artistas que lucen unos cuerpo de envidia. Cómo no hacerles caso.
Un estudio realizado por el doctor Heinz Valtin, publicado en la revista American Physiological Society, da cuenta de una investigación realizada a lo largo de diez meses que concluye que no existe base científica que apoye los tan mencionados beneficios de beber dos litros de agua al día.
El especialista señala que, de hecho, dos litros son demasiado para un adulto que trabaja en una oficina, que sólo hace ejercicio moderado; que lleva una vida sedentaria, en pocas palabras. El exceso de agua podría provocar hiponatremia, que quiere decir, bajos niveles de sodio en la sangre.
La dosis no es universal, ni la regla se aplica por parejo. Las personas con problemas renales, o que realizan esfuerzos físicos por encima del promedio (en la vida urbana, sobre todo), tendrían que tomar más de ocho vasos de agua cada 24 horas.
Otras fuentes de información precisan que como más de 70% del cuerpo humano está formado por H2O, debe ser repuesta de manera continua, y coinciden en que la cantidad varía según la edad, la actividad y el género.
Datos proporcionados por otros expertos en la materia recomiendan que los niños de entre 9 y 13 años consuman 2.1 litros diarios; las niñas, 1.9 litros. En el caso de los adultos la cantidad también varía: las mujeres deben tomar alrededor de 2 litros diarios; los hombres, 2.5 litros. Si la mujer está embarazada o en periodo lactando el consumo aumenta 0.3 litros y 0.7 litros, respectivamente.
Hablar de ingesta de agua no se trata únicamente de agua como tal, sino de cualquier líquido que contenga agua y de la que se toma a través de la comida. Se recomienda que entre 75 y 80% provenga de las bebidas y alrededor de 20% de los alimentos.
En el lado opuesto de perder minerales, está la deshidratación, cuyas consecuencias son nefastas. La Fundación para la Investigación Nutricional dice que la pérdida de más de 2% de agua en el cuerpo provoca disminución de la memoria a corto plazo, descenso del rendimiento físico, dolor de cabeza y fatiga. A mayor porcentaje, mayores riesgos.
Fuente: NW Noticias.