Francisco X. Salazar S.
Defender a todas las mujeres, también a las no nacidas.
Se avecina una fuerte tormenta por el norte. Tormenta política y comercial, no meteorológica. Los problemas se acumulan en las relaciones entre México y Estados Unidos. Tal parece que los estadounidenses secuestrados y asesinados en Matamoros fueron la gota que derramó el vaso, que ya estaba casi lleno. Y como de costumbre en México, ya se estaban tardando en hacer algo las autoridades mexicanas, así que tuvo que venir un manotazo del FBI, DEA y otros para que en un día encontraran a los sobrevivientes y a los cadáveres y los entregaran a los estadounidenses.
Si hubieran sido mexicanos, centroamericanos o haitianos no se habría siquiera iniciando la investigación, colmo sucede en Zacatecas, Guanajuato, Colima, Michoacán, Guerrero, o en casi todo Mexico. Pero como eran estadounidenses…
El tema más álgido con EU es el de la seguridad. Ya van varias ocasiones en las que los militares de aquel lado denuncian el control que tiene el crimen organizado sobre buena parte del territorio mexicano (hace dos años hablaban del 30% del territorio, después de las elecciones del 2021 en las que fue evidente la participación de los criminales, financiando a sus socios y amenazando, hostigando y hasta eliminando candidatos opositores, es mucho más que eso).
La inocente y tonta propuesta de “abrazos, no balazos” y la deferencia del presidente López para “el señor Guzmán Loera” y su familia, son motivo de sospecha de algún tipo de acuerdo, cuando no preocupación o burla en EE. UU. y en el mundo entero. Se habla de que el presidente López les ha entregado el control en una buena parte del país a los delincuentes. Y en esos territorios extorsionan, secuestran, desaparecen y matan ciudadanos o rivales impunemente. Ya se habla de más de 160,000 homicidios en lo que va del sexenio de López, además de los desaparecidos.
Pero si solo fueran los homicidios de mexicanos y centroamericanos, a los estadounidenses no les preocuparía tanto. Les molesta mucho cuando agraden a sus connacionales pero más aún les preocupa el fentanilo y la cocaína producidos en México e introducidos a EE. UU. por los carteles mexicanos –con la incapacidad o complicidad de autoridades aduanales de ambos lados– para satisfacer la altísima demanda que tienen allá. Y esta demanda es principalmente responsabilidad de los estadounidenses. Y también combatir a los distribuidores gringos.
Si hay demanda, habrá oferta. Y siendo una droga barata, altamente adictiva y muy letal está causando más de 100,000 muertes al año en EE. UU. Y eso sí les preocupa. Por lo mismo, cada día se acumulan más opiniones acerca de considerar a los carteles mexicanos como terroristas, lo cual, según la ley de EE. UU. les autorizaría a perseguir y a combatir a los terroristas en cualquier lugar en que se encuentren sin tener que avisar a las autoridades de los países. Esto no va a suceder con el demócrata Biden, pero ¿qué tal si llega un republicano a la Casa Blanca?
Relacionado con el tema de seguridad está el de los migrantes y la trata de personas. Desde el inicio de su sexenio el presidente López hizo una invitación inesperada. Ofreció a los centroamericanos que México recibiría a todos los que quisieran venir y hasta les ofreció trabajo. Empezó la avalancha y al llegar a frontera norte se encendieron los focos rojos en Estados Unidos y empezaron a acumularse en la frontera los migrantes por cientos de miles. El amigo de López, Trump, llegó rapidísimo a un acuerdo con Ebrard, “manda miles de militares mexicanos a la frontera sur o te impongo aranceles a tus exportaciones”. Rapidito se “dobló”, dijo Trump. Pero la avalancha se incrementó por el Covid y por los mexicanos que ante el fracaso económico de López querían pasar al otro lado. Hoy la migración ilegal es un problemón para las ciudades fronterizas mexicanas y estadounidenses. Y no se ve solución en el horizonte.
Pero el tema de seguridad no es el único. El tema comercial está subiendo de tono. Los decretos presidenciales para prohibir la importación del maíz modificado genéticamente y el herbicida glifosato, lo que según las autoridades de EE. UU. carece de fundamento científico, ya llegaron a los consultas donde el gobierno mexicano tendrá que demostrar que son peligrosos para la salud de los mexicanos, cuando en todo el mundo se consumen millones de toneladas de este maíz.
A eso hay que añadir el desastre diplomático por la enfermiza amistad del presidente López con los enemigos del “imperialismo yanqui”, esos dictadores que no celebran elecciones o encarcelan a los adversarios:, como el heredero de Chávez, Maduro, el desterrador y encarcelador del obispo Álvarez, Ortega, y el condecorado por López, Díaz-Canel, o el golpista Castillo. Esos que inspiran a los marxistas Marx Arriaga, más protagónico que la maestra Lety, y el venezolano Sady Loaiza, que están intentando acabar con la educación particular, promover el comunismo y castigar a los editores de libros que mencionen el ser mujer u hombre (cita del Académico Carlos Ornelas, Excelsior, 8/ marzo/2023). Además de la chunga internacional que causan estos neomarxistas, dejan a México en ridículo ante el mundo y le pican la cresta a los gringos con sus alabanzas a Marx y a Lenin.
Si a esto agregamos la renuencia a condenar la artera invasión rusa a Ucrania… Negros nubarrones en el horizonte norte.
Potosinos Enchilados
- El Obispo nicaragüense Rolando Álvarez, encarcelado por su paisano , el dictador Ortega, ahora se ha vuelto ilocalizable hasta por sus familiares. No quieren informar dónde lo tienen encarcelado. ¿Lo habrán desaparecido?
- No le perdonan en el Palacio Virreinal a la Ministra Norma Piña por no haberse puesto de pie para la entrada del presidente López en la ceremonia del 5 de febrero. Ayer la amenazaron con una ametralladora (¿de juguete? ), con mentadas de madre en un lenguaje muy tropical. Seguro que López extraña a su amigacho Zaldívar.
- Les recomiendo a todos nuestros amables lectores que comparen las dos marchas contra López, la de ayer y la del 26 de marzo pasado, con la que ya anunció el presidente López para el 18 de marzo. Acarreados vs. voluntarios. Hay que hacer la comparación.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.
Es Ingeniero Químico, maestro en Administración y doctor en Educación. Empresario. En 2005 ocupó el cargo de Secretario del Trabajo y Previsión Social a nivel Federal. Fue dos veces diputado federal y senador, y una vez diputado local. Ha sido catedrático por más de 25 años en universidades públicas y privadas. Miembro del Partido Acción Nacional de 1975 hasta abril de 2022. Ha sido consejero de Canacintra, Industriales Potosinos, Unión Social de Empresarios de México y de Coparmex. Ocupó el cargo de secretario general en el Sindicato de Académicos de la UASLP. Actualmente es presidente del Instituto de Política Laboral A.C.