Fernanda Durán
Tras 24 años de militancia formal y casi una vida entera como priista, el diputado Edmundo Torrescano Medina entregó su renuncia al partido este miércoles 19 de junio, en medio del inicio de un procedimiento en su contra para expulsarlo del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Apenas este mismo día le fue notificado el inicio del proceso para su expulsión promovido por Eikoo Koasicha Hipólito, recién seleccionado como regidor de representación proporcional en la capital, y a quien calificó como un personaje cercano a Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, dirigente nacional del PRI, por lo que tomó la decisión de renunciar.
El procedimiento en su contra denunciaba declaraciones a medios de información en contra de las dirigencias nacional y estatal del PRI calificadas como actos de desprestigio, y aunque podría combatirse en tribunales, Torrescano Medina mencionó que conllevaría a una suspensión y por lo tanto “no les dará el gusto” de consumar la expulsión.
“La verdadera razón es una sola, una venganza política que busca castigarme porque hace un año fui la única voz que se opuso a la imposición de quienes hoy dirigen el partido, pues sólo consiguieron dos cosas: llevarlo al peor descalabro de su historia e imponerse en las primeras posiciones plurinominales”.
En un discurso previo al anuncio de su renuncia reprochó la actuación de las actuales dirigencias, tanto nacional como estatal.
“Antes de fallecer mi papá en 1989, participó en los trabajos rumbo a la Asamblea Nacional del PRI; en su último discurso dijo ‘requerimos de una nueva ideología, de una nueva cultura en el discurso político’, que nos abramos a las nuevas expresiones de autocrítica, que convoquemos a un auténtico movimiento democrático entendiendo este no sólo como el interior de nuestro partido, sino que trascienda la vida social. A 35 años heredo el reclamo de mi padre porque en este México, en el que el autoritarismo se ha restaurado, sus palabras cobran más vigencia que nunca. Fui militante del PRI aún antes de nacer, mi familia fue militante del PRI y asumimos los costos y sacrificios de ser; en el PRI desarrollé mi carrera profesional y política (…). Yo hoy dejo de ser priista, pero ellos nunca dejarán de ser los sepultureros del PRI; la historia los juzgará, no como revolucionarios sino como los vende patrias que son. A 15 días del peor fracaso en la historia del PRI, no han sido capaces de asumir las consecuencias de su incompetencia”.
Hasta ahora negó haber recibido propuestas para aliarse con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) o el Partido del Trabajo (PT), además de que no tiene ofertas para sumarse al proyecto de Enrique Galindo Ceballos en sus siguientes tres años de presidencia municipal.
Torrescano Medina evitó aconsejar u opinar si perfiles como Galindo Ceballos deberían considerar también la renuncia.
Ahora el grupo parlamentario del PRI queda solamente con Alejandro Leal Tovías, ya que estaba conformado por Yolanda Cepeda Echavarría, quien también renunció al partido en diciembre del año pasado y se fue al PVEM.
Como priista, Edmundo Torrescano fue secretario de organización en el PRI de 2019 a 2021; secretario privado del entonces gobernador Juan Manuel Carreras López; y asesor del Congreso del Estado de 2013 a 2015.