Ciudad de México (11 de Marzo).- Los Legionarios de Cristo empiezan a resentir en sus filas la crisis causada por su fundador Marcial Maciel, acusado de pederastia, ya que sus estadísticas registran que en 2014 hubo una baja histórica en el número de integrantes tomando en cuenta sacerdotes, seminaristas y aspirantes.
“La crisis institucional que hemos vivido ha contribuido a la salida de la congregación de algunos curas. La mayoría sigue viviendo su ministerio en alguna diócesis y estamos seguros que harán mucho bien”, reconoció Benjamín Clariond, portavoz de la orden en Roma, en entrevista con la agencia Notimex.
El gran total de Legionarios de Cristo (aspirantes y religiosos) pasó de dos mil 739 en 2013 a dos mil 463 en 2014, con una disminución neta de 276; es decir que la merma en la congregación es de 10 por ciento en apenas 12 meses.
Pero el número real de salidas es mayor, ya que ingresaron nuevos miembros (tanto a los centros vocacionales como a los seminarios), por lo que en la sumatoria no se reflejan todas las deserciones.
“La disminución en número de sacerdotes no nos toma por sorpresa, pero nunca deja de doler que un hermano se vaya, aún cuando en muchos casos nos siga uniendo una profunda amistad”, agregó el vocero legionario.
Clariond reconoció que la crisis por el caso Maciel, culpable de abusos sexuales contra menores y otros delitos, “ha tenido un impacto importante” en esta situación, junto con otros factores, como el aumento de la edad promedio que es de 46 años para los curas y 36 para todos los integrantes.
Los que se fueron
En su informe la congregación detalla que la disminución contabiliza a quienes han dejado el camino de preparación al sacerdocio, a aquellos que solicitaron una dispensa de sus votos y a los que han pasado a otra categoría estadística al recibir la ordenación sacerdotal.
Fueron nueve curas y un diácono transitorio los que solicitaron la dispensa del celibato y de las obligaciones relacionadas con la ordenación, por lo que abandonaron la vida religiosa.
Otros 29 sacerdotes renunciaron a la Legión de Cristo, pero no a la vida consagrada, por lo que han sido incardinados en alguna diócesis.
“La mayoría de ellos se encontraban ya con permiso de ausencia legítima de comunidad o exclaustrados con miras a la incardinación y en 2014 se concluyeron los períodos de prueba establecidos por los obispos diocesanos”, revela el informe.
El resto de las bajas sacerdotales son los siete que fallecieron el año pasado.
“El hecho de enviar los actos de gobierno y las estadísticas a todos los legionarios forma parte de las lecciones que hemos aprendido en este camino de renovación”, subrayó Clariond.
Los países de procedencia de los que han abandonado la Legión de Cristo son México, Italia, Venezuela, Australia, España, Brasil, Estados Unidos y Colombia, aunque el informe no revela cuántos de cada nación decidieron salir de la congregación.
Los que están por irse
Entre los que pertenecen a la orden, pero que es posible que la abandonen, hay 17 curas exclaustrados para reflexionar sobre su futuro que se separaron por el canon 686 del Código de Derecho Canónico, el cual señala que se puede “conceder por causa grave el indulto de exclaustración… pero no por más de un trienio”.
Adicionalmente, entre los que todavía pertenecen a la congregación hay una docena de sacerdotes se encuentran en “situación irregular”; es decir, se ha vencido el plazo del permiso de ausencia o de exclaustración y no han regresado ni el Vaticano les ha concedido el indulto de salida de la orden.
También se contabilizan 23 sacerdotes que, por motivos de trabajo apostólico, estudios o salud, viven temporalmente fuera de su comunidad legionaria.
Actualmente tienen 734 alumnos en los centros de vocaciones que no se contabilizan oficialmente entre los miembros de la congregación, pero el año pasado eran 945, lo que además representa una baja de 22 por ciento entre los aspirantes.
México es el país de origen de la mayoría de los miembros con 690; seguido de Estados Unidos con 282; España 187; Brasil 109 y Colombia 102.
Aunque las cifras no son positivas, la congregación decidió hacerlas públicas porque “la información y transparencia ayuda a que haya una mayor corresponsabilidad entre todos los legionarios y a que la forma de gobierno sea más participativa. Todavía hay camino por delante, pero se van dando pasos firmes”, concluyó Clariond.
Fuente: Milenio