El cruel surrealismo potosino

Por Edgardo Pérez Alvelais

Ayer escribía mi columna Ajedrez Político en medio de la tensión, algarabía y celebración del Club América por su tricampeonato al vencer al Monterrey de la mano del técnico brasileño André Jardine -traído a México por el Atlético de San Luis, y que demostró ser todo un Máster de la estrategia futbolística al darle al equipo de Coapa su título 16 en campeonatos de la Liga Mx lo que lo hace, por mucho, el conjunto más ganador en la historia del balompié en nuestro país.

Todo transcurría bien, redactaba sobre el valor de políticos que en alguna coyuntura invitan a periodistas de todas las tendencias y vertientes diversas a sostener una plática abierta con ellos para intercambiar puntos de vista sobre coyunturas específicas que cimbran a los actores políticos y a la opinión pública. Tal fue el caso del alcalde Enrique Galindo Ceballos que sostuvo un encuentro con colegas entre los cuales tuve el honor de asistir, un álgido día de la semana pasada, en un icónico hotel del Centro Histórico.

Empero, mi pluma se enfrió y se desvió al enterarme del artero asesinato del alcalde morenista de Tancanhuitz de Santos, Jesús Eduardo Franco, que fue balaceado por un presunto grupo armado mientras viajaba sobre la carretera federal Ciudad Valles-Tamazunchale, a la altura del ejido Palmira Nuevo, a solo 5 minutos de la cabecera municipal.

El ataque ocurrió cuando el joven edil huasteco, junto a sus acompañantes, viajaba a bordo de un automóvil de color rojo. Sujetos desconocidos interceptaron su vehículo y abrieron fuego contra los ocupantes, dejando un saldo fatal de cuatro víctimas mortales. Además de Franco, murieron otras tres personas.

El ataque, que tuvo lugar en una zona de difícil acceso, generó de inmediato una profunda consternación, tristeza e indignación en la región. La noticia circuló rápidamente en redes sociales, provocando un sinfín de reacciones. En primera instancia -para ganar tiempo- ciertas instancias oficiales decían: “No está confirmado”. Sin embargo, conforme pasaron los segundos, la terrible desgracia se confirmó y nuevamente puso a San Luis Potosí en el mapa de los casos de alto impacto en el país.

Fuentes de la Fiscalía General del Estado salieron con el tradicional lugar común: “Estamos trabajando en la investigación para esclarecer los hechos y dar con los responsables del crimen”. No hace mucho, el día de la inauguración de la Arena Potosí, tanto el alcalde Enrique Galindo Ceballos como el gobernador Ricardo Gallardo Cardona, si bien ponderaban que San Luis Potosí “es una isla de seguridad” -en relación a estados vecinos presas de la delincuencia y asesinatos al por mayor como Guanajuato, Zacatecas, Tamaulipas, Querétaro y Jalisco-, reconocían que no estábamos exentos de hechos criminales de gran magnitud. Y ayer así sucedió.

Antes habían asesinado y decapitado al alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, y había circulado un video con amenazas de un presunto grupo delictivo por calles de la capital potosina, incluso la instancia procuradora de justicia abrió una carpeta de investigación. Luego vinieron diversos hechos delictivos y la colocación de amenazantes mantas, pero la grave situación que viven otras entidades como Sinaloa en la guerra civil entre la chapiza y la mayiza diluía ese tipo de informaciones como los bloqueos en Ojuelos con carros incendiados.

Pero ayer los demonios sueltos tocaron a San San Luis Potosí y hoy somos nota nacional, tema que seguramente será tocado hoy por la presidenta Claudia Sheinbaum en la conferencia matutina del pueblo encargando el caso a Omar García Harfuch, secretario de Seguridad,  y a la potosina Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobernación. Veremos si el caso es atraído por la Fiscalía General de la República. Observaremos qué dicen el gobernador Ricafrdo Gallardo y su secretario de Gobierno, J. Guadalupe Torres Sánchez, pero ambos deben reforzar los operativos de seguridad en todo el territorio potosino donde con esos hechos de sangre afectan gravemente la tranquilidad y el espíritu navideño con hechos que tienen claros visos de desestabilización. Alguien en forma perversa está jugando una ruda partida en el tablero. Al final de cuentas, buscar la venganza a través del asesinato solo convierte a quienes recurren a ese cruel delito en monstruos sin alma y sin corazón.

Volviendo a mi tema inicial, varios colegas ya han tocado algunos puntos como el cobro de impuestos, autorizados para Gobierno del Estado y rechazados para el Ayuntamiento; la traición de Sara Rocha a Galindo con su expulsión luego de que él la defendió con Alito Moreno que ya no la aguantaba en el CEN del PRI; el truene entre ambos originado porque la ex alcaldesa de Real de Catorce y ex diputada federal -hoy local con licencia en busca de su reelección en la dirigencia-, trató de vender el padrón del tricolor a Sonia Mendoza, que no cayó en la trampa, para intentar que Galindo perdiera su reelección pero el edil capitalino logró casi 200 mil votos. Sara Rocha no logró descarrilarlo y con la expulsión lo fortaleció aún más. También la molestó la exigencia de cargos en el municipio y otras peticiones que le fueron rechazadas.

No todos los políticos se atreven a abrirse y entrar en dialogo de retroalimentación con periodistas de peso en la opinión pública. Recuerdo que el último que lo hizo fue Horacio Sánchez Unzueta pero sólo con directores de medios de comunicación a quienes les dictaba línea en el viejo sistema hegemónico análogo anterior a las redes sociales que lo cambiaron todo.

Se reconoce la valentía de Galindo que habló abiertamente de casos como la aprehensión del Chapo Guzmán, la pérdida de la candidatura a la gubernatura del PRI de Juan Ramiro Robledo por Fernando Silva Nieto, la derrota de él mismo cuando se le atravesó Toranzo y Carreras con la coyuntura del escape del Chapo, y muchos otros temas que por el momento tienen que madurar. Galindo mostró espolones de gallo, único contrapeso real al gallardismo que aún así le arrebató 50 juntas de mejoras para el Partido Verde en la capital potosina y, por lo tanto, objeto de ataques al verlo el grupo en el poder con posibilidades reales de competirle en el 2027.

Decía Winston Churchill: “¿Tiene enemigos? Bien, eso quiere decir que usted ha defendido algo con convicción, en algún momento de su vida”.

Información de Última Hora:

Detienen a presunto implicado en el asesinato de Jesús Eduardo Franco, alcalde morenista de Tancanhuitz.

En un rápido operativo realizado durante la madrugada de hoy lunes 16 de diciembre, autoridades de la Secretaría de Seguridad y Participación Ciudadana (SSPC) y de la Fiscalía General del Estado (FGE) lograron la detención de Manuel N., presunto participante en el homicidio del alcalde Jesús Eduardo Franco. El crimen ocurrió la noche del domingo en el municipio de Tancanhuitz, en la Huasteca Potosina.

De acuerdo con las autoridades, Manuel N. fue capturado a pocas horas del ataque que cobró la vida del exedil. Actualmente, el detenido se encuentra a disposición de la FGE para que se realicen las investigaciones pertinentes y se deslinden responsabilidades.

Asimismo, se confirmó que otro de los principales sospechosos del asesinato es un regidor en funciones del mismo ayuntamiento, quien ya es buscado activamente por las fuerzas de seguridad. Hasta el momento, este individuo permanece prófugo.

La zona continúa bajo un fuerte operativo de seguridad, y las autoridades han adelantado que podría haber más detenciones en las próximas horas como parte de la investigación en curso.

Simultáneas:

• ¿Cuándo perdimos a México? Ya irán saliendo más temas e informaciones. Me quedo con la siguiente frase que resume lo sucedido anoche en San Luis Potosí. Son palabras de Fernando del Paso en su discurso de recepción del Premio de Excelencia en las Letras José Emilio Pacheco: “Dime José Emilio: ¿A qué horas, cuándo, permitimos que México se corrompiera hasta los huesos? ¿A qué hora nuestro país se deshizo en nuestras manos para ser víctima del crimen organizado, el narcotráfico y la violencia?

• 40 años de militancia en el PRI: Galindo nos mostró su credencial del PRI que data de enero de 1985 que lo acredita como miembro del tricolor, de hueso colorado. Hizo una comparación con la pasión que enmarca a los verdaderos creyentes de esa ideología: “Es como el americanismo”. Por eso va a litigar su expulsión del PRI y seguramente va a ganar la partida, no en los órganos putrefactos de Sara Rocha, sino en la Sala de Monterrey del Trife, para sentar un precedente par priistas y no priistas. Tampoco se quedara donde no lo quieren y más cuando le sobran invitaciones en todos los partidos políticos para sumarse a sus filas.

• De realismo mágico y costumbrismo. Definitivamente hay que leer nuevamente Cien Años de Soledad de Gabriel García Márquez y Pedro Páramo de Juan Rulfo, ambos ya en Netflix como series que han logrado llevar la esencia de ambas obras cumbre de la lengua española a las pantallas del streaming Los libros y las series no hacen más que corroborar que si el escritor surrealista Franz Kafka hubiese nacido en San Luis Potosí, sólo sería un escritor costumbrista.

¡Hasta el próximo lunes!

Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.