El número de Euler

Frater Ignatius

El número e es bautizado así por Leonardo Euler, uno de los matemáticos más importantes de todos los tiempos. Rivaliza con Pi pero en campos distintos de la matemática. Uno se refiere a la geometría y el que nos ocupa al cálculo. No es fácil decantarse por uno o por el otro a causa de que los dos números  son muy interesantes  y sobre todo útiles.

El número e se aproxima a 2.71828 y puede calcularse de muchas maneras. Puede reflejar una función de límite de la expresión de 1 +1/n) elevada a la enésima potencia cuando n va aumentando indefinidamente. Gracias a los avances en computación, este número se ha aproximado hasta los 1400000000000 decimales.

El número de Euler aparece en áreas muy diversas, es decir, en disciplinas aparentemente dispares pero unidas por este extraordinario número:

– En la fórmula de la catenaria, la curva que forma un cable colgado de sus extremos.

– En el cálculo del interés compuesto.

-Numerosas aplicaciones de probabilidad y estadística y en funciones exponenciales.

– Es uno de los integrantes de la identidad de Euler, la fórmula más hermosa de la matemática.

– En biología es de gran importancia para describir el crecimiento celular.

– En electrónica, describe la descarga de un condensador.

– En química para la descripción de las concentraciones de iones o el desarrollo de una reacción.

– Se relaciona con los números complejos.

– Se utiliza para datar fósiles por medio del carbono 14.

– Se utiliza en la fórmula que mide la pérdida de calor de un cuerpo inerte para saber el momento en que muere.

– En la razón áurea y en la espiral logarítmica.

Existe una ecuación que luego veremos con más detenimiento en donde se utiliza el número e. Es considerada la ecuación más bella de las matemáticas. Une los cinco símbolos matemáticos más importantes. Estos números son el 1, el 0, Pi, e, i (la raíz cuadrada de menos uno). No se comprende cabalmente esta fórmula, pero se intuye que debe tener una importancia esencial en el universo matemático. Atrae por igual a los filósofos, a los místicos, a los científicos y a los matemáticos.

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