Francisco X. Salazar S.
“Sic transit gloria mundi”. Así de efímera es la gloria del mundo, dice Kempis.
Increíble: el dueño del micrófono, el creador de la narrativa, el que desde su Olimpo mañanero lanzaba truenos, rayos y centellas contra los que osaban opinar o pensar distinto; el oráculo de la opinión del pueblo; el que perdonaba vidas y pecados de los mortales; el defenestrador de funcionarios, políticos y periodistas; el Rey del Cash… se cayó de su trono en dos semanas.
Fue desplazado por un huipil y una bicicleta; por una sonrisa fresca e inteligente que habla de corrido, conciso, preciso y macizo. Por una aspirante que no le aceptó sus calumnias y le exigió piso parejo en los medios oficiales; que fue a los tribunales y le ganó el juicio logrando que un juzgado le exigiera que le diera derecho de réplica a una senadora calumniada. Por la persona a la que no le abrió la puerta de “su” Palacio Virreinal.
Después de cinco años de ser el amo y señor de la narrativa, un error de principiante, o la soberbia, lo hicieron caer.
No puede aceptar que no se hable más de él que de cualquier otro. Que hasta sus “periodistas” paleros le pregunten sobre Xóchitl. Que entre todas sus corcholatas no logren más notas que ella. Que los noticieros diurnos, vespertinos y nocturnos hagan fila para una entrevista, mientras sus aburridas corcholatas gastan chorros de cash en espectaculares y acarreados que cobran y se van. Que los señalados por su dedo no entusiasmen.
Por eso montó en cólera, más aún cuando sus acarreados no aguantaron la lluvia y el rollo; y habiendo cobrado, empezaron a vaciar “su” Zócalo sin haber terminado su enésimo “informe-festejo-conmemoración” de su triunfo en el 2018. Bueno, hasta la voz se le volvió más chillona de lo habitual. Un caso para estudio en los programas académicos de posgrado.
Mientras tanto, el país en llamas. Michoacán, Chiapas, Guanajuato, Tamaulipas, Guerrero, Sinaloa, Zacatecas, Baja California, Nuevo León, Oaxaca, Colima, Chihuahua, Estado de México y otros estados son escenario de una violencia inédita. Asombrados y asustados ciudadanos son testigos de la guerra entre los narcos con una Guardia Nacional ausente. Más de 1000 balazos de alto calibre a Hipólito Mora de las autodefensas en La Ruana, Michoacán, a quien después incineraron. 16 funcionarios estatales secuestrados en Chiapas solo le merecen al presidente López el cruel chistorete de que “los voy a acusar (a los secuestradores) con sus abuelitos”. Antes no los amenazó con decirles “fuchi caca”.
Y qué decir de Nuevo León: asesinados en el paredón al estilo castrista, con todo y tiro de gracia. O en Guerrero, donde se los entregaron desmembrados a la alcaldesa de Chilpancingo, que suele desayunar con “Los Ardillos”. La política de “abrazos, no balazos” en su máxima expresión y el señor dice que nomás es en la mitad de los estados –qué tanto es tantito– y que las noticias son politiquería. Ah, pero no le gustó el comentario del Obispo de Apatzingán, Cristóbal Ascencio García, quien después de reclamarle que, en vez de duelo ante las víctimas, se haga fiestas para autofelicitarse, lo invitó a recorrer junto con él los pueblos de la Tierra Caliente michoacana. Como respuesta, López lo acusó de estar coludido con los oligarcas.
Además, la capital del país sitiada por más de nueve horas en todos los accesos carreteros por grupos de maestros que alegan que no les han cumplido los compromisos que les hicieron cuando apoyaron la campaña de YSQ. Ya van tres secretarios de Educación que no responden. ¿Y el nivel educativo? Bien, gracias. Y, por si fuera poco, el país sin agua, con incendios y sin recursos para combatirlos. Lo bueno es que pronto inauguraremos una refinería que no refina, mientras que los accesos al flamante Aeropuerto “Internacional” siguen en obra negra. Ya ni hablamos de Segalmex, ni de los amigos de la familia virreinal y otro largo etcétera.
No tiene remedio, por eso tampoco le gustó el comentario del Obispo de San Cristóbal, Luis Manuel López, acerca de que hay un vacío de autoridad. Se volvió a enojar, se cayó de la nube en que andaba.
Potosinos Enchilados
- Xóchitl en San Luis Potosí. Las corcholatas ya pasaron por aquí y ni quién las pelara fuera de sus acarreados. Pero Xóchitl Gálvez logró en San Luis lo que no se veía desde la época del Dr. Salvador Nava Martínez: entusiasmo y pasión por un candidato, en este caso candidata. Jóvenes, comerciantes, mujeres, maestros, médicos, funcionarios y empresarios se vieron echados para adelante, dispuestos a ser otra vez pioneros de la democracia en México. Y se vio la unión de la Sociedad Civil con los Partidos Políticos en torno al Frente Amplio por Mexico. Y la presencia de MC augura una Alianza opositora total.
- Tal como van las cosas, a las corcholatas les va a convenir quedar en el segundo y tercer lugar en su dizque precampaña que no es precampaña porque el primer lugar, hasta ahora Claudia, se quedaría como el perro de las dos tortas; o sea, sin nada, al igual que todos los que dejaron su hueso para seguirla y que ahora andan muy nerviosos por su negro futuro. En cambio, el segundo y el tercer lugar tienen asegurada su plurinominal, uno en el Senado y otro en los Diputados, tal vez hasta coordinadores de los grupos parlamentarios de Morena. Y al cuarto lugar le quedaría un lugar en el gabinete, pero de Chiapas o Tabasco, o en el ayuntamiento de Macuspana o el de Fresnillo, Zacatecas.
- Mentira espectacular: los espectaculares de las corcholatas son cortesía del pueblo bueno y sabio. Son gratuitos.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.
Es Ingeniero Químico, maestro en Administración y doctor en Educación. Empresario. En 2005 ocupó el cargo de Secretario del Trabajo y Previsión Social a nivel Federal. Fue dos veces diputado federal y senador, y una vez diputado local. Ha sido catedrático por más de 25 años en universidades públicas y privadas. Miembro del Partido Acción Nacional de 1975 hasta abril de 2022. Ha sido consejero de Canacintra, Industriales Potosinos, Unión Social de Empresarios de México y de Coparmex. Ocupó el cargo de secretario general en el Sindicato de Académicos de la UASLP. Actualmente es presidente del Instituto de Política Laboral A.C.