Por Eduardo Delgado Torres
Una de las periodistas lastimada por los “guaruras” del alcalde capitalino, Ricardo Gallardo Juárez, admitió que los reporteros están expuestos a incidentes violentos, “con funcionarios que no quieren cumplir lo que es parte de su labor, transparentar lo que hacen”.
La reportera -quien pidió el anonimato por razones laborales-, sostuvo que fueron lesiones leves las que le produjeron los guardaespaldas y opinó que “lo más apropiado habría sido que el alcalde se detuviera, pues no creo que el tema fuera como para esconderse”, dijo en alusión al caso de la compañía Vigue, empresa recolectora de la basura a la que el edil pretende cancelarle la concesión y para lo cual es indispensable la aprobación del Cabildo.
Durante los tres años que ha trabajado como reportera, dijo, no es el primer incidente con servidores públicos; recordó que Macrina Martínez Pozos, la ex titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano, Vivienda y Obras Públicas, se molestó con ella un día “por las preguntas que le hacía y me dijo que era poco profesional”.
“Me han sucedido otros incidentes con otros funcionarios pero ninguno de gravedad, creo que este (el de este jueves) es el que ha llamado más la atención”.
Relató que este jueves, cuando el Presidente Municipal salió de Palacio dos grupos de periodistas, por separado, lo espero para entrevistarlo, sin embargo el edil “no quería dar ninguna versión sobre la cancelación de la sesión”.
Señalo que personal de seguridad bloqueó el paso a un grupo de reporteros para evitar que lo siguieran hasta su coche. “El siguió caminando y nosotros lo encontramos de frente. Le hicimos algunas preguntas, medio platicando con él, no se quiso parar en ningún momento”.
“Entonces, no sé si estuvo mal de mi parte, opuse mi propio cuerpo para tratar de continuar hablando con el alcalde y las personas de seguridad intentaron cerrar la puerta en todo momento y me lastimaron, pero fue una lesión leve”, precisó.
A su parecer habría sido prudente que Gallardo Juárez se detuviera y les ofreciera una explicación de las razones por las que quería reservarse sus comentarios.
“Aparentemente iba sonriendo, pero no sé si iba enojado porque la sesión se canceló, se agotó el tiempo y no pudieron sesionar como lo planearon”, añadió.
La colega descartó que lo sucedido haya sido intencional, pero consideró que los guardaespaldas se excedieron “un poco” con un grupo de reporteros a los que les impidieron el paso para acercarse al jefe de la comuna.
Refirió que tras el incidente el director de Comunicación Social del Ayuntamiento, David Reza, “nos pidió una disculpa a nombre del alcalde y dijo que este les iba hacer un llamado de atención a sus guardaespaldas”.
Descartó presentar un recurso legal contra el Gallardo Juárez, pero “sí me gustaría que hubiera más respeto y que hubiera una forma de protegernos como periodistas”.
Finalmente comentó que tras el incidente, en platica con sus compañeros de profesión coincidieron en que “debemos organizarnos, pero hasta el momento todo de ha quedado en lo que pensamos y en lo que queremos hacer, pues no se ha encontrado el apoyo de ninguna instancia”, lamentó.