Por Victoriano Martínez
Desde el primer minuto de hoy comenzaron las campañas para elegir por primera vez a los integrantes del Poder Judicial del Estado (PJE). No hubo arranques de medianoche con movilizaciones masivas para mostrar músculo electoral, pero sí la aparición de mensajes proselitistas en redes sociales, espacio al que se confinó la propaganda electoral judicial.
Será una campaña electoral muy diferente a las que hasta ahora ha enfrentado la ciudadanía con una propaganda tan invasiva con la proliferación de espectaculares, spots de radio y televisión y movilizaciones masivas que difícilmente puede hacer persona que no se entere de la elección que está en puerta.
En la primera elección judicial, que todo el electorado se entere de que habrá votaciones el 1 de junio es el primer reto. La propaganda sobre el proceso electoral federal ayuda, pero no necesariamente implica que un ciudadano deduzca que también se elegirán a los integrantes del Poder Judicial local.
Una diferencia que se refleja en el gasto ostentoso que representan, desde los topes de gastos de campaña, lo que cada aspirante, por ejemplo, a gobernador (titular del Poder Ejecutivo) puede derrochar en sus actividades proselitistas en contraste con lo que los candidatos a conformar el PJE pueden gastar.
En 2021, cada candidato a gobernador pudo gastar 29 millones 223 mil 864.70 pesos de financiamiento público, más otro tanto de financiamiento privado. Es decir, 58 millones 447 mil 729.40 pesos.
Los candidatos al PJE tienen prohibido tanto el financiamiento público como el privado y sólo podrán gastar de sus recursos propios 258 mil 518.79 pesos para quienes contiendan por cargos de elección estatal y 146 mil 119.32 pesos para los casos de jueces de primera instancia.
Se requieren 226 candidatos a cargos estatales del PJE para que sus campañas costaran lo que costó le de un solo candidato a gobernador en el proceso electoral de 2021, sin contar que varios de esos candidatos rebasaron con mucho los topes de campaña. De los 201 aspirantes a cargos en el PJE, 100 participan para ocupar los 54 cargos estatales.
En el caso de candidatos a jueces de primera instancia, con lo que gastó un solo candidato a gobernador se podría patrocinar la campaña de 400 candidatos de la elección en curso. Para ocupar los 23 cargos de ese tipo participan 101 candidatos.
Si se considera suficiente el gasto permitido a los candidatos al PJE, ¿por qué no aplicar el mismo criterio para los cargos de elección popular de los otros dos poderes?
La limitada capacidad proselitista y de propaganda y promoción que tienen los candidatos a ocupar cargos en el PJE traslada la carga de incentivar la participación al organismo electoral, en este caso al Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana, cuyas limitaciones van más allá de la estrechez presupuestal impuesto por el gobernador Ricardo Gallardo Cardona.
Así es como surge un Programa Emergente de Educación Cívica para la Elección de Personas Juzgadoras del Poder Judicial del Estado, aunque con alcances bastante limitados en contraste con la movilización de que son capaces los partidos políticos en las otras elecciones.
Comparado con los miles y miles de spots de radio y televisión de que pueden echar manos los partidos políticos, los candidatos al PJE los tienen prohibidos y el organismo electoral apenas contará con siete spots diferentes para transmitir 3 mil 944 impactos.
Spot 1: Posicionamiento de la elección y cargos por elegir. Spot 2: Conoce las funciones de los cargos por elegir y su relevancia. Spots 3, 4 y 5: invitación a conocer las candidaturas a magistraturas del Supremo Tribunal de Justicia, las del Tribunal de Disciplina Judicial y las personas juzgadoras de primera instancia. Spot 6: conoce las trayectorias de los candidatos en el sistema “Conóceles”. Y spot 7: llamado al voto.
Hasta las primeras horas de este 29 de abril, para cuando se anunció la activación del sistema Conóceles, la consulta sobre los antecedentes de los candidatos aún no era posible y en su lugar se abría un archivo PDF con las imágenes de las boletas que se utilizarán el 1 de junio,
Aunque diversos integrantes del CEEPAC propusieron activar también un simulador de votación como el publicado por el Instituto Nacional Electoral, básico para agilizar la votación el 1 de junio, las limitaciones presupuestales impidieron que estuviera listo. Esperan que esta misma semana pudiera concluirse su programación y activación para el público.
Ya estamos en las campañas para elegir a los integrantes del PJE, pero en las calles, en los medios de comunicación y en los espacios públicos no se percibe un ambiente electoral.
Así de especializado resulta este proceso electoral que implica un mayor esfuerzo y reflexión para los electores, antes que ser sometidos a la manipulación emocional y chantajista que les aplican los partidos políticos.
¿Será posible trasladar este esquema de participación ciudadana electoral a las otras elecciones y no que la dinámica de aquellas comience a contaminar este proceso electoral inédito como se comienza a ver en la forma de promocionarse de algunos de los aspirantes en sus redes sociales?