Por Victoriano Martínez
Por tercera vez el gobierno de Ricardo Gallardo Cardona coloca al Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (CEEPAC) en una circunstancia en la que tendría que explicar cómo es posible que cumpla obligaciones con presupuestos muy por debajo de lo que originalmente estableció como requerimientos.
El primer caso fue con la realización del plebiscito para la municipalización de Villa de Pozos, cuando el CEEPAC estimó un presupuesto ideal de 55 millones 844 mil 003.23 pesos y advirtió que esa propuesta no podía reducirse a menos de 23 millones 901 mil 624.31 pesos o resultaría imposible realizarlo. Al final lo tuvo que hacer con 20 millones de pesos.
Las elecciones de 2024 también pasaron de un presupuesto ideal de 307 millones 504 mil 971.06 pesos a sólo 100 millones de pesos en el arranque y que terminó en 179 millones de pesos luego de que el organismo electoral autónomo le suplicara a Gallardo Cardona dos ampliaciones presupuestales.
El plebiscito para la municipalización de Villa de Pozos lo pudo realizar el CEEPAC con el 35.81 por ciento del presupuesto que consideraba ideal, y las elecciones de junio del año pasado con el 55.34 por ciento del costo estimado originalmente.
Hoy, el CEEPAC enfrenta el mismo reto de organizar unas votaciones con características de misión imposible. En la primera adecuación presupuestal al proceso de elección del Poder Judicial, el CEEPAC se ajustó a organizarlo con el 52.82 por ciento del gasto calculado originalmente.
A diferencia de los dos casos anteriores, en esta ocasión el CEEPAC eliminó por completo dos de los cinco capítulos de gasto: Transferencias, asignaciones, subsidios y otras ayudas por 6 millones 806 mil 725 pesos y Bienes muebles, inmuebles e intangibles por 15 millones 303 mil 988 pesos.
Dentro de esos capítulos se encuentra el gasto en Equipo de cómputo y tecnologías de la información que consideraba un gasto por 13 millones 972 mil pesos. La complejidad del cómputo de la elección judicial, que por lo mismo no estará a cargo de los funcionarios de casilla, da la idea de que ese tipo de equipo resulta necesario para realizarlo. ¿Se trata de un gasto efectivamente prescindible?
Entre los recortes dentro de los otros tres capítulos de gasto destacan tres casos en los que la adecuación presupuestal les incrementó el gasto: los honorarios asimilables a salarios en un 22.29 por ciento, el material impreso e información digital en un 258.31 por ciento y los servicios de Consultoría administrativa, Procesos, Técnica y en Tecnologías de la Información en un 40 por ciento.
No fueron los únicos casos de incremento, pues si se considera que en el presupuesto original no se había contemplado el gasto en Materiales y útiles de enseñanza, que ahora aparezca en la primera adecuación con un monto de 700 mil pesos indica un replanteamiento de prioridades.
La adecuación presupuestal se acordó el 14 de marzo, apenas dos días después de que el CEEPAC se dio por enterado de que el gobierno estatal pretende entregar parte del presupuesto en especie.
Dado que no aparece explícitamente en el acuerdo, algunas expresiones dan pie a considerar que la desaparición de dos capítulos de gasto podría explicarse porque los bienes y servicios contemplados podrían ser aportados en especie por el Ejecutivo. Por ejemplo, prestarle el Equipo de cómputo y tecnologías de la información que no se adquirirá por haber sido eliminado en el capítulo 5000.
En los antecedentes del acuerdo se menciona que mediante el oficio CEEPC/PRE/139/2025, el CEEPAC solicitó al gobernador el “recurso para atender prioridades inmediatas que permitieran avanzar en la realización de múltiples actividades inherentes al proceso para la elección extraordinaria de Personas Juzgadoras del Poder Judicial del Estado”.
Y señala como “erogaciones económicas iniciales por la cantidad de $110,000,000.00 (Ciento diez millones de pesos 00/100 M.N.)”. ¿Acaso para una siguiente adecuación presupuestal se establecerán las “erogaciones en especie” como presupuesto adicional?
Por tercera ocasión el CEEPAC, a pesar de su autonomía, se ve sometido a la voluntad de Gallardo Cardona para cumplir con su obligación de dar certeza a un proceso de votación. Sólo falta que, como aportación en especie, Gallardo Cardona le ofrezca al CEEPAC utilizar de apoyo la estructura electoral paralela de las ayudas sociales de SEDESORE y el DIF.
