Carlos Rubio
En el año 2020 en San Luis Potosí, el 99.4 por ciento de las personas que fueron encarceladas no recibieron una sentencia, lo que significa que únicamente fueron privadas de su libertad bajo la figura de la prisión preventiva.
Esto convirtió al estado en la segunda entidad a nivel nacional con más individuos en la cárcel sin haber sido juzgados, según una investigación publicada por el medio Animal Político.
Esto quiere decir que apenas el 0.6 por ciento de las personas encarceladas en el 2020 habían recibido una sentencia firme por un juez. El resto estaba en espera de que se resolviera su caso.
La investigación señala que en México cada día se encarcelan a 300 personas, por lo que se ha presentado un aumento desmedido de la población penitenciaria. Esto sería a causa de la serie de reformas que le fueron aprobadas al presidente Andrés Manuel López Obrador en 2019, y que permitieron la prisión preventiva para una mayor cantidad de delitos.
Como resultado se obtuvo que, en tan solo dos años, 130 mil personas fueron detenidas y colocadas en prisión preventiva en 21 estados de la República.
Por encima de San Luis Potosí solo se encuentra la Ciudad de México, donde el 100 por ciento de las personas encarceladas en 2020 no tuvieron una sentencia.
Entre otros datos que revela la investigación, se encuentra que a nivel nacional, entre 2017 y 2018, 91 mil 380 personas recibieron prisión preventiva, mientras que entre 2019 y 2020 fueron 114 mil 880, lo que refleja un aumento del 25.7 por ciento.
Desde 2015 se mantenía una tendencia referente a que salían más personas de prisión que las que entraban, sin embargo, desde 2019 esta cifra se invirtió y comenzaron a ingresar más personas de las que egresan, para 2020, 108 mil 655 fueron encarceladas, mientras que 91 mil 635 lograron salir.
El informe hace hincapié en que, con el paso de los meses, el uso de la prisión preventiva como medida cautelar sufrió un incremento radical, cuando anteriormente era menos tomado en cuenta.
En enero de 2019 apenas se utilizaba la prisión preventiva para el 32 por ciento de los casos y en el 68 por ciento se optaba por otra medida cautelar, como pago de una garantía económica, presentarse cada 15 días ante un juez, vigilancia con personal de seguridad, entre otras.
Sin embargo, para diciembre de 2020 las cifras se revirtieron y la prisión preventiva pasó a ser la medida cautelar más utilizada con el 58.8 por ciento.