Francisco X. Salazar Saenz
El senador Juan Pablo Adame Alemán logró más en un día que la mayoría de los senadores en seis años. Su discurso obtuvo el aplauso de todos los asistentes en el Senado, y su iniciativa recibió la aprobación unánime de todos los senadores presentes.
Fue un discurso sumamente emotivo, que hizo llorar a la mayoría de los presentes y que recibió un aplauso unánime de los senadores que se pusieron de pie. Mostró a un ser humano que, ante la posibilidad de la muerte, exalta la vida cotidiana como una gran oportunidad para amar lo que tenemos, buscar el bien común y el bienestar de quienes queremos. Es una oportunidad única para vivir intensamente, agradecer a Dios y a nuestros seres queridos que nos han apoyado en momentos adversos, luchar con esperanza sin temor al Más Allá, ya que nadie sabe cuándo se nos agotarán las oportunidades para servir, agradecer, amar, y ser testigos de nuestras convicciones, así como forjadores de nuestro propio destino.
En la cercanía de la muerte y en medio del dolor, Juan Pablo Adame recordó el pensamiento de San Juan Pablo Segundo, por quien lleva su nombre, acerca de cómo el dolor hace que la vida sea más profunda, comprensiva, humilde, sincera, solidaria y generosa. También planteó la pregunta que ha inquietado a todos los seres humanos de todas las épocas: ¿Para qué vivimos? ¿Por qué estamos aquí? La respuesta de Adame fue que vivimos para servir al prójimo y a los seres que amamos, para hacer el mayor bien posible, ya que el amor siempre triunfa. Por eso, hizo un llamado: “Vivamos, vivamos, vivamos”.
Después de jurar cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes que de ella emanan, el Senador Adame presentó una iniciativa para obligar al Gobierno a cumplir con la obligación constitucional de cuidar la vida y la salud de todos los mexicanos, especialmente de aquellos que actualmente sufren debido a la deficiencia del sistema de salud desmantelado por el Gobierno, lo cual ha cobrado millones de vidas y ha causado mucho sufrimiento a las familias de los enfermos en todo el país.
Gracias querido senador Juan Pablo Adame, que Dios te bendiga, tú dolor ha sido una bendición para ti y para muchos.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.
Es Ingeniero Químico, maestro en Administración y doctor en Educación. Empresario. En 2005 ocupó el cargo de Secretario del Trabajo y Previsión Social a nivel Federal. Fue dos veces diputado federal y senador, y una vez diputado local. Ha sido catedrático por más de 25 años en universidades públicas y privadas. Miembro del Partido Acción Nacional de 1975 hasta abril de 2022. Ha sido consejero de Canacintra, Industriales Potosinos, Unión Social de Empresarios de México y de Coparmex. Ocupó el cargo de secretario general en el Sindicato de Académicos de la UASLP. Actualmente es presidente del Instituto de Política Laboral A.C.
