Antonio González Vázquez
Las enfermedades cardiovasculares y la diabetes mellitus fueron la primera y segunda causa de muerte de potosinos durante el primer trimestre del año en curso, con mil 425 y 759 víctimas respectivamente, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
De acuerdo con el informe de Estadísticas de Defunciones Registradas de enero a marzo de 2024, publicado por esa institución, las defunciones por enfermedades cardiovasculares por sexo fueron 638 mujeres y 787 hombres.
En el caso de la diabetes mellitus, murieron 365 mujeres y 394 hombres.
Ambas enfermedades están estrechamente relacionadas con la obesidad y el sobrepeso, en cuyo caso, hasta el 74 por ciento de la población en el estado padece algún grado de sobrepeso, según estima la Secretaría de Salud.
Al respecto, el Instituto Nacional de Salud Pública estima que las enfermedades del corazón y la diabetes tienen factores determinantes, entre estos los de carácter estructural relacionados a la educación, la desigualdad y la pobreza, así como por los hábitos alimenticios.
En ese sentido, la ingesta de comida “chatarra”, así como de productos procesados con altos contenidos de azúcar, sodio, grasas y calorías traen como resultado el sobrepeso y la obesidad, lo cual está asociado al riesgo de contraer la diabetes y potenciar las enfermedades cardiovasculares.
La prevalencia de sobrepeso y obesidad en adultos es de 37.1 por ciento en adultos y de 41.1 por ciento en adolescentes, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición.
De las cinco principales causas de muerte en San Luis Potosí al primer trimestre del año, las cardiovasculares y la diabetes ocuparon el primero y segundo lugar, le siguen los tumores malignos, con 538; los accidentes, con 254; y la influencia y neumonías, con 246 defunciones.
En el caso de las mujeres, la cuarta causa de muerte fueron las enfermedades pulmonares obstructivas crónicas con 114 víctimas, mientras que las enfermedades del hígado cobraron la muerte de 141 hombres, para ser la quinta causa de fallecimiento en la población masculina.
La tasa de defunciones por cada 100 mil habitantes según la residencia de la persona fallecida, fue de 182.1.