María Ruiz
Existe una gran desigualdad y falta de oportunidades en el sector laboral para las mujeres y hombres trans que pertenecen a la comunidad LGBT+, así lo informaron las activistas e integrantes de la organización civil “Igualdad”, Rubí Benítez e Irazami Portillo.
Portillo refirió que el obstáculo más grande que enfrentan para poder obtener un trabajo es el comprobar su identidad ante los empleadores, quienes las y los cuestionan con sesgos de discriminación e incluso las y los estereotipan.
“El primer impedimento que tenemos es cuando vas a solicitar un empleo y no coincide tu nombre de nacimiento con tu imagen. Las personas empleadoras nos miran de manera despectiva, y aunque en un inicio aclaran que no hay problema con ello, dentro del proceso nos ponen trabas y eso hace que nosotros desistamos”, explicó Rubí.
Una situación que desde hace décadas, y de manera histórica, ha obligado principalmente a las mujeres trans a desenvolverse en la prostitución o “trabajo sexual” para poder tener un ingreso económico que dignifique su vida.
“Las mujeres trans nos enfrentamos mayormente a estas dificultades que la mayoría. Las obliga definitivamente a ejercer el trabajo sexual o también el estilismo por la escasa o poca apertura que hay para que tengamos un empleo”, señalaron.
Rubí Benítez agregó que estos contextos de falta de oportunidades laborales originan también una violencia estructural que vulneran los derechos humanos de la comunidad trans, y que derivan incluso en crímenes de odio.
“Las mujeres trans tienen que volver a ejercer el trabajo sexual, en lugares que son peligrosos y que sin duda su vida está en riesgo. Ha aumentado considerablemente la violencia en contra de nosotros y estas violencias se ejercen desde un comentario, el mal llamado piropo, y por supuesto en agresiones físicas que escalan a trans feminicidios”, detallaron.
En este sentido, Rubí Benítez remarcó que estas prácticas de violencia son muy significativas y evidencian que en la sociedad aún existe una mirada sin apertura ni inclusión.
“Hay mucha intolerancia y existen precedentes de esta violencia, hay que marcarlo y dejarlo claro. También es necesario exhortar a las autoridades pertinentes del Gobierno del Estado a que brinden vigilancia, acciones de inclusión y que por supuesto que laboralmente se nos tome en cuenta. Hemos estado trabajando en una iniciativa que precisamente señala que el tres por ciento de la plantilla laboral de las cámaras de comercio, industria y espacios de trabajo dentro de Gobierno del Estado se les otorgue a las personas trans y esa será también nuestro camino de lucha”, indicaron.
