Abelardo Medellín
El problema de desabasto de agua potable que padece la capital de San Luis Potosí ha empeorado de cara al final de 2023, y el número de viviendas afectadas aumentó un 25 por ciento, de acuerdo con el alcalde Enrique Galindo Ceballos.
El presidente municipal precisó que desde junio y hasta la fecha, las lluvias que han acontecido no han sido suficientes y por tanto se tiene “ausencia de agua” en las cuatro presas que surten a la capital.
Además, indicó que no cuentan con información sobre las reparaciones hechas a la cortina de la Presa El Realito.
“El Realito sigue igualito, ni siquiera sabemos si ya empezaron a reparar la fuga”, señaló.
Galindo Ceballos expresó que, debido a ambos factores, se calcula que el número inicial de 240 mil hogares afectados por la falta de agua se ha incrementado hasta 300 mil.
“Estamos atendiéndoles con pipas, se hace lo posible”, añadió.
A esto se suma que la falta de lluvias ha provocado que el manto friático no se recargue como debería y pone a la ciudad en un “dilema serio”.
“Podemos sacar más agua, pero si no se recarga el manto, tarde que temprano se va a secar”.
También reveló que durante un año han solicitado la declaratoria de sequía al Gobierno Federal para recibir atención adecuada, sin embargo, el apoyo de las autoridades se ha limitado a entregar 44 millones de pesos que han servido para perforar algunos pozos.
Galindo Ceballos comentó que, para combatir este problema, el Ayuntamiento, en coordinación con el Interapas, ha desplegado la perforación de una decena de pozos que serán conectados al sistema de suministro de agua, acción que podría concluirse en una o dos semanas más.
Finalmente, dijo que para combatir el desabasto de agua por el que ha pasado la capital el último año, la administración municipal ha tenido que erogar cerca de 300 millones de pesos, entre la perforación de pozos, los contratos de pipas, la modernización de 40 pozos y la atención a 7 mil fugas.
