Eduardo Delgado
Sigue exconsejero Carlos Ponce en el Poder Judicial; a quien le encantan los madrazos
Al siguiente día de culminar su encargo de cinco años como integrante del Consejo de la Judicatura, Carlos Alejandro Ponce Rodríguez fue dado de alta en la nómina del Poder Judicial del Estado como “Administrador Judicial del Sistema de Gestión”.
Ponce Rodríguez es recordado en el Poder Judicial del Estado porque el 3 de junio de 2016, a través de la aplicación de mensajería instantánea WhatsApp, le hizo saber al entonces juez Jesús Xerardo Martínez Muñoz: “Me encantan los madrazos”.
El pasado 30 de agosto, el Congreso del Estado definió el certamen para ratificarlo en el cargo o elegir a un nuevo integrante del Consejo de la Judicatura. Ponce Rodríguez fue eliminado en la primera de dos rondas de votaciones porque no obtuvo ningún voto.
No obstante, consultado el directorio de servidores públicos del Poder Judicial actualizado al pasado 31 de octubre, Ponce Rodríguez asumió -al día siguiente del término de su nombramiento- el cargo de “Administrador Judicial del Sistema de Gestión”.
Como funcionario judicial obtiene una remuneración bruta mensual de 65 mil 567.22 pesos, mientras que como consejero percibía 92 mil 539.22 pesos al mes.
Como informó este portal de noticias en junio de 2016, Ponce Rodríguez -hijo del abogado Merced Ponce Blanco- fue acusado de homicidio culposo por la muerte de un taxista.
El 22 de noviembre de 2012 por la noche, sobre el bulevar del Río Santiago, al ruletero se le descompuso su unidad y, mientras la reparaba, el taxi y el operador fueron embestidos por otro carro conducido por el Ponce Rodríguez. La víctima resultó con traumatismo cráneoencefálico severo y falleció el día 27 de aquel mes.
En el caso de Martínez Muñoz, este denunció ante el Consejo de la Judicatura que cuando él y Felipe Aurelio Torres Zúñiga fueron integrantes de la terna propuesta por el gobernador a los diputados locales para la elegir al sustituto del exmagistrado Zeferino Esquerra Corpus, Ponce Rodríguez lo amedrentó.
Le anticipó que, de resultar él electo, “tendría en él al mayor de los enemigos, que no sabía contra quiénes me estaba enfrentando” y le recomendó abstenerse de “seguir haciendo gestiones con los diputados”.
