Por Victoriano Martínez
De acuerdo con el calendario emitido por el Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (CEEPAC), el viernes de esta semana termina formalmente “el periodo de precampañas para la elección a la Gubernatura del Estado, Diputaciones y Ayuntamientos”.
Ese mismo día también “concluye el plazo para que las y los aspirantes a candidaturas independientes a los cargos a la Gubernatura del Estado, Diputaciones de Mayoría Relativa y Presidencia Municipal obtengan el respaldo ciudadano”.
Se cierra una etapa que abre paso a una serie de definiciones que bien podrían aclarar el panorama de los contendientes que aparecerán en la boleta el próximo 6 de junio, o bien podría dejar ver en toda su magnitud las presiones, conflictos y duelos de fuerza entre los aspirantes de las dos principales opciones: el PAN dentro de la coalición Sí por San Luis, y los precandidatos de Morena.
Del lado de la coalición “Juntos Haremos Historia en San Luis Potosí” (PVEM-PT-PANAL) todo está definido desde que el 20 de noviembre el CEEPAC dictaminó la validez de las coaliciones y su único precandidato que, si opera para algo, es en realidad para que en las otras dos coaliciones las cosas de acomoden a su favor.
En cuanto a las candidaturas independientes, deberá quedar clara la situación de las 10 mil firmas de Arturo Segoviano y las inconformidades que propiciaron la renuncia de Antonio Ramírez Alfaroa su postulación.
En el caso de Sí por San Luis, la mirada está puesta en los movimientos de los precandidatos del PAN Octavio Pedroza, Marco Gama y Xavier Nava, por llevar el domingo a las urnas intrapartidistas los votos de los militantes de ese partido que, según la convocatoria son 6 mil 873, y según el padrón registrado ante el INE con corte a septiembre son 7 mil 47.
De acuerdo con la convocatoria, cada aspirante debía presentar un mínimo de 687 firmas para obtener su registro como precandidato.
Pedroza aseguró haber presentado 2 mil 800 (40.74 por ciento del padrón citado en la convocatoria), y Gama mil 380 (20.08 por ciento). Los dos sobrevivientes en la contienda panista acaparan 60.82 por ciento de los militantes. Si las firmas se traducen en votos, el resultado está definido desde el registro de aspirantes.
Xavier Nava aseguró que presentó mil 500, a las que habría que sumar las de Sonia Mendoza, quien no dio a conocer la cantidad de firmas presentadas, por lo que se puede considerar el mínimo (687). Eso dejaría a Xavier Nava con 2 mil 187 firmas que representan el 31.82 por ciento de los militantes, por lo que requeriría el apoyo de los 506 sobrantes y 128 adicionales para superar a Pedroza.
La lucha por los votos los ha llevado a simular pactos de unidad ante la dirigencia nacional y convertir la contienda en una guerra de lodo en la que el CEN panista se decanta por Xavier Nava, en tanto que el CDE por Pedroza. Una disputa en la que Gama, cual tercero en discordia, podría sorprender.
Si el juego se vuelve sucio entre los panistas para buscar la mayoría entre 6 mil 873 votantes, presagia lo que se puede esperar cuando vayan a la búsqueda del voto de los 2 millones 33 mil 752 ciudadanos que actualmente reporta el padrón electoral estatal.
Si en el PAN hay diferencias entre la dirigencia nacional y la local, en Morena no se quedan atrás. Primero los locales frustraron la coalición que le interesaba a Mario Delgado con el PVEM para apoyar a Gallardo Cardona. Ahora, cual desquite, Delgado tomó a la candidatura por San Luis Potosí como comodín para cumplir la cuota de género y tiró la encuesta a la basura.
Y no es porque no se atienda el principio de la paridad de género, sino que difiere de los lineamientos originales de la convocatoria a la que respondieron 10 hombre y tres mujeres.
Lo menos que tendría que hacer Delgado al anunciar la postulación es presentar los resultados de la encuesta con lujo de detalles para demostrar que el grado de competitividad de quien resulte su abanderada justifica que la local sea la séptima candidatura femenina de su partido.
Tan poco serio se ha vuelto el proceso de selección en Morena, que hasta circuló la versión de que la hija de Ricardo Salinas Pliego, la ex senadora Ninfa Clara Salinas Sada –por haber nacido en algún municipio del Estado– podría ser la candidata a la gubernatura.
Presiones, conflictos, duelos de fuerza, pagos de facturas, desquites, oportunismos y hasta posibles obstrucciones a candidaturas ciudadanas y más son parte de los ingredientes del más extraño coctel de precampañas que esta semana comenzará a aclararse… o a complicarse.
