Carlos Rubio
La Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador. A pesar de lograr su objetivo, uno de los partidos aliados de Morena decidió votar en contra: el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), bancada en la que se encuentra Ricardo Gallardo Cardona, quien se ha denominado como “defensor” de la Cuarta Transformación.
Esta iniciativa plantea cambiar el orden de prioridad de plantas generadoras de energía para darle el primer lugar a las plantas hidroeléctricas de la Comisión Federal de Electricidad sobre empresas privadas, las cuales fueron colocadas hasta el final. Además, prevé cambiar el esquema de subastas al que se debe someter la CFE para comprar la energía eléctrica y, posteriormente, revenderla a consumidores; esto le daría la libertad de comprar directamente su opción preferida sin subastas de por medio.
La reforma ha causado polémica entre la oposición, ya que se menciona que no hay piso parejo hacia todas las opciones que generan electricidad y se favorece únicamente a la CFE. Además, el apostar por la energía hidroeléctrica podría derivar en el uso del combustóleo o diésel cuando no haya disponibilidad de agua para las plantas hidroeléctricas.
El propio Andrés Manuel López Obrador definió como su “prioridad” y de la Cuarta Transformación, la aprobación de esta iniciativa, la cual, luego de una larga discusión, fue aprobada con 304 votos a favor, 179 en contra y cuatro abstenciones.
Anteriormente, los partidos Encuentro Social (PES), del Trabajo (PT) y el PVEM han ayudado ha conseguir la mayoría de los votos en la Cámara de Diputados para que las iniciativas del presidente se aprueben sin problema; así ocurrió cuando se desaparecieron los 109 fideicomisos y fondos el año pasado. No obstante, esta vez la fracción del PVEM se pronunció en contra de la reforma y su líder, Arturo Escobar, calificó de “inadmisible” votar a favor de ella.
El pasado 11 de febrero, día en que Leonel Serrato Sánchez se unió a las filas del PVEM, Ricardo Gallardo Cardona mencionó que ahí se encontraban “las verdaderas personas que hacen la 4T en San Luis Potosí”. Por ende, centró su discurso en decir que, al colocar a Mónica Rangel como su candidata a la gubernatura, Morena no demostraba ser la verdadera impulsora de la Cuarta Transformación, en cambio, él sí.
“Los únicos que siempre han defendido al Presidente de la República. Los únicos que siempre hemos puesto el pecho por él, aquí estamos”, mencionó Gallardo Cardona, quien se ha ayudado de la imagen de López Obrador para impulsarse y tratar de arrastrar el gran número de electores que respaldan al presidente sin dudarlo.
Incluso, el candidato del PVEM a la gubernatura nombró a Leonel Serrato como el coordinador de los trabajos de la Cuarta Transformación en la capital potosina; así es como Morena denomina a sus candidatos para las próximas elecciones, por ende, en su discurso, Gallardo Cardona intentó tomar el papel de un dirigente morenista.
Al grito de: “¡Que viva la Cuarta Transformación!”, cerró Ricardo Gallardo su discurso que quedó sólo en palabras y no en hechos, luego de que el día de ayer en la Cámara de Diputados su voto fuera en contra de la iniciativa de López Obrador y quedara en duda su apoyo a la Cuarta Transformación.