Antonio González Vázquez
Los Hombres G le entraron a la guerra mediática por el agua y en ejercicio de nado sincronizado, aprovecharon los aguaceros de los últimos días para hacerse publicidad. La crisis hídrica es cosa del pasado, el problema está resuelto porque ya llovió y eso, pues nada, Sí que es una bendición. Cada quien en su presa para presumir.
En su retorno tras unas prolongadas vacaciones, por la mañana del lunes con todo y comitiva de funcionarios y periodistas, el reelecto alcalde Enrique Francisco Galindo Ceballos fue a supervisar la presa San José.
El martes por la tarde, el gobernador José Ricardo Gallardo Cardona hizo lo propio en el embalse de El Peaje.
El ego los une.
“Vean qué hermosa luce nuestra presa San José que ya está casi a la mitad de su capacidad”, exclamó el edil capitalino al compartir en redes sociales imágenes de su recorrido.
“Ahijadx, vean nada más que bonita está la presa El Peaje. Gracias a Dios ya se encuentra al 60 por ciento de su capacidad, y aún da para más”, compartió a su vez el mandatario estatal al jactarse de las obras de rehabilitación realizadas por su administración.
Las lluvias de finales de junio e inicios de julio pusieron fin a la sequía. Las presas, hasta hace poco reducidas al mínimo de su capacidad lucían para dar pena.
Galindo y Gallardo no perdieron la oportunidad para tomarse fotografías y videos para que todas y todos sepan que se preocupan y ocupan de la problemática del agua que padecen las y los capitalinos
Y ahí los tiene: Los Hombres G contemplando reflexivos el espejo de agua desde lo alto de las cortinas, la mirada puesta en el horizonte como quien vislumbra un futuro promisorio en el que no habrá más desabasto de agua.
Más importante que la presa es sin duda el alcalde, por eso, sin venir al caso, la gente del Interapas desplegó un plano de la antiquísima obra de ingeniería, momento más que oportuno para la foto: Galindo en chamarra y gorra azul del ayuntamiento y sus anteojos de intelectual, pasea su mano derecha sobre el papel cartografiado para mostrar que está dando cátedra al tiempo de planificar lo qué se ha de hacer.
“Así se trabaja sin estar quejándose de otras administraciones”, aplaudió un seguir del alcalde en redes sociales.
Ya con el sol de la tarde, pues las nubes cargadas de agua ya se habían ido, los publicistas de Gallardo lo colocaron en el pasaje superior de la presa El Peaje, de modo que diera la espalda a la cámara para mostrar como observaba en solitario su obra.
El mensaje de la imagen fue captado de inmediato por uno de los seguidores del gobernador que, categórico publicó: “cuando Dios guía, el hombre no se equivoca”.
“Vean nomás que chulada”, describió el gobernador al aclarar que es una presa que está “prácticamente nueva” y de paso, responsabilizó a la “Maldita Herencia” de tenerla en el olvido.
Los políticos no dejan de ser una suerte de oportunistas, sólo falta que las lluvias sean resultado de sus gestiones ante la madre naturaleza.
