Chihuahua, México (27 de noviembre de 2015).- Consumir alimentos con demasiada grasa y sal, fumar y falta de ejercicio, combinado con una irritación, puede afectar directamente al corazón y causar un infarto, advierten especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
El coordinador auxiliar de Gestión Médica de la Delegación Estatal del IMSS en Chihuahua, Antonio Baños, dijo que el ejercicio, la alimentación balanceada y controlar las situaciones estresantes, minimizan el problema.
Puntualizó que el corazón es el músculo fuerte, responsable de gran parte de las funciones del cuerpo, pero si se descuida o se hacen cosas que no lo beneficien, puede manifestar molestias y comenzar con diferentes malestares físicos.
Explicó que el corazón humano actúa como una bomba que late a más de 60 pulsaciones por minuto, lo que da como resultado, cerca de 32 millones de latidos por año, que impulsan sangre hacia los órganos, tejidos y células del organismo; Baños detalló que la sangre bombeada, además de suministrar oxígeno y nutrientes a cada célula, hace el intercambio y recoge el dióxido de carbono, así como sustancias de desecho, por eso, si el flujo del líquido hemático se altera, se ve comprometida la vida de la persona.
Enfermedades causadas.
Si se está bajo las condiciones antes mencionadas, se puede propiciar enfermedades como hipertensión, arritmias, cardiopatías, trombosis venosa y ataques cardiacos, entre otros.
Señaló que “irritarse” no soluciona un problema, sin embargo, puede afectar directamente al corazón.
Por esa razón, recomendó tomar un descanso de varios minutos para pensar varias veces las cosas y analizar una posible solución, sin necesidad de someter al organismo a funciones aceleradas propiciadas por coraje, miedo o desesperación.
Fuente: La Razón.