Jaime Nava
La fantasmal proveedora de medicamentos que facturó más de 70 millones de pesos en los ayuntamientos gallardistas de Soledad de Graciano Sánchez y San Luis Potosí, encabezados por Gilberto Hernández Villafuerte y Ricardo Gallardo Juárez, respectivamente, hoy celebra su cumpleaños número 52.
Sandra Sánchez Ruiz tenía 48 años cuando su nombre se hizo de conocimiento público por primera vez el jueves 31 de marzo de 2016, cuando Astrolabio Diario Digital y La Jornada San Luis dieron a conocer la existencia de pagos por más de 34 millones de pesos por concepto de medicamentos para personal de confianza a una persona identificada con ese nombre.
La información había sido obtenida a través de la página de Internet del Ayuntamiento de San Luis Potosí, misma que fue deshabilitada por “mantenimiento”. El entonces oficial mayor de la capital, Noé Lara Enríquez, aseguró que Sandra Sánchez Ruiz era la representante del laboratorio Sanfer; sin embargo, los laboratorios negaron conocerla o tener algún tipo de relación con la hasta ahora fantasmal proveedora.
Ante la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris) Sandra Sánchez Ruiz registró un negocio bajo el nombre “Sandra Farmacia” en cuyo domicilio en realidad se encontraban las instalaciones del Servicio Médico del Ayuntamiento de Soledad de Graciano Sánchez.
Luego, los funcionarios gallardistas dijeron que habían asignado directamente los millonarios contratos a Sandra porque fue la única que “aceptó fiar”.
El número 1783 “A” de la calle San Luis en la colonia San Felipe en Soledad de Graciano Sánchez se utilizó para justificar el negocio que la desconocida Sandra hizo con los ayuntamientos. La llamada “Sandra Farmacia” apareció en abril del 2016 y, a pesar de lo lucrativa que aparentaba ser, desapareció antes de que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) pudiera efectuar la orden de visita VRF0600008/16 para revisar la contabilidad y comprobantes de pago de contribuciones, bienes o mercancías, los cuales serían cotejados con las listas de medicamentos que presuntamente surtió a los municipios.
Sandra se amparó contra la visita del SAT y de entre todos los abogados contrató a Julio Héctor Aspe Hinojosa para que la representara en ese asunto quien públicamente se ostentaba como abogado de Ricardo Gallardo. Al ser cuestionado al respecto, Gallardo Juárez se negó a responder si conocía al abogado manteniendo el asunto en completa opacidad y mandando “mucho al diablo” a los medios que preguntaban: “¿quién es Sandra Sánchez Ruiz?”
Hoy se sabe que en el Ayuntamiento de San Luis Potosí facturó 55 millones de pesos, mientras que en la administración soledense facturó 22 millones 700 mil pesos, pero de la proveedora no se sabe prácticamente nada, salvo que habitaba el domicilio que se encuentra en la primera cerrada de Abedules número 100 y que, de acuerdo con su Clave Única de Registro de Población (CURP): SARS680714MDFNZN09 nació un día como hoy de 1968.
El festejo para Sandra es doble si considera que a cuatro años de distancia y a poco más de dos años de que se presentaran denuncias en su contra ante la Fiscalía General del Estado, misma que luego fue turnada a la Fiscalía General de la República, ni el SAT ni las auditorías ni las fiscalías han logrado encontrarla.
Caso Sandra Sánchez Ruiz, un monumento a la corrupción: Sebastián Pérez
