Influencer se une a Casa Orquídea y pide apoyo para la comunidad LGBT+ de SLP

María Ruiz

Entre las calles empedradas y los murmullos de la vida cotidiana de una de las colonias más antiguas de San Luis Potosí, se encuentra un refugio que no solo ofrece techo y comida, sino también un lugar donde florece la esperanza.

Casa Orquídea es una organización sin fines de lucro que se ha convertido en lugar de resiliencia para la comunidad LGBT+ que enfrenta múltiples desafíos, en donde la discriminación e invisibilidad aún son parte de las violencias que les atraviesan, pues sobreviven gracias a los apoyos y donaciones de la ciudadanía, mas no de las autoridades gubernamentales.

Ante esta situación, Wendy Guevara, influencer y creadora de contenido, también se ha unido a esta lucha.

Wendy, quien ha vivido su propia historia de supervivencia, visitó este 2 de abril Casa Orquídea en donde fue nombrada embajadora del refugio; desde su propio contexto de superación comprende la dificultad que enfrentan las personas LGBT+, especialmente las mujeres trans.

En rueda de prensa, Guevara enfatizó que a esta comunidad le atraviesan diversas violencias como su historia de vida, pues ella también buscó un hogar, no empatía, y un sitio en donde comer “un taquito” mientras realizaba su transición.

Wendy, quien encontró en las redes sociales una herramienta poderosa para visibilizar las ausencias en la sociedad, dijo que a pesar de los avances, aún no se es completamente inclusivos.

“La comunidad LGBT+ sigue enfrentando obstáculos y estigmas”, señaló.

Desde San Luis Potosí, la influencer exhortó a la ciudadanía para apoyar a Casa Orquídea.

“Donemos alimentos, productos no perecederos y nuestro tiempo. Cada gesto cuenta. Porque en la lucha por la igualdad y la dignidad, no podemos dejar a nadie atrás”.

Por su parte, el presidente de la organización, Francisco Olvera, remarcó que el simple acto de acompañar a Casa Orquídea puede marcar la diferencia en la vida de quienes enfrentan situaciones críticas.

Casa Orquídea es más que un edificio de ladrillos y cemento. Es un refugio de esperanza, un faro en la tormenta, y juntos es posible que siga brillando para aquellos que más lo necesitan.

“No tenemos esta casa y refugio para que se escondan, es para alentar a quienes son parte de la comunidad. Tenemos muchas historias de supervivencia, queremos una vida más bella e inclusiva para ellas y ellos”.

Skip to content