María Ruiz y Abelardo Medellín
Integrantes de la colectiva Por ellas, por nosotras y por todas, compuesta por familias víctimas colaterales de feminicidio, acudieron al Memorial por Mujeres Víctimas de Feminicidio luego de que el Gobierno del Estado invadió el espacio para ubicar el escenario en el cual se realizará el evento musical posterior al Grito de Independencia.
En el sitio se pudo constatar que trabajadores del Gobierno del Estado retiraron las consignas en memoria de las mujeres asesinadas de manera violenta en San Luis Potosí, sin avisar a las familias.
También se observó que las cruces rosas dispuestas por las madres víctimas fueron ocultadas en el interior del Palacio de Gobierno.
Para la activista y defensora de los Derechos Humanos, Sofía Viramontes González, quien forma parte de esta colectiva, estas acciones develan el desinterés por las autoridades de que prevalezca la memoria no solo de las víctimas, sino de aquellas mujeres arrebatadas por la violencia feminicida en el estado.
“La indignación que tenemos las víctimas de feminicidio acerca de la invasión al espacio, un espacio que debería ser respetado y cuidado por las instituciones, sobre todo en este tipo de eventos. Si los ciudadanos ven que el Gobierno hace esto, ¿respetarán de la misma forma el memorial en otra situación?”, expresó.
Viramontes González también señaló estos hechos como una violación a los derechos de las víctimas de feminicidio y sus procesos de reparación.
“¿Acaso sus procesos [de las víctimas] no tienen validez? Esto es querer invalidar la existencia de los feminicidios y la de las víctimas, ¿en realidad somos un número más? El respeto al memorial es trascendental para cada uno de sus procesos, basta de hacer menos nuestros derechos”, apuntó.
Tras advertir la ausencia de las cruces, dos jóvenes integrantes de Amnistía Internacional asistieron al lugar y fueron atendidas por el secretario general de Gobierno, Guadalupe Torres Sánchez, y por el subsecretario de Gobernación, Jorge Vega Arroyo.
Luego de una breve charla con ambos funcionarios, las jóvenes fueron invitadas a pasar al Palacio de Gobierno para mostrarles que las cruces de madera estaban bajo el resguardo de la seguridad del lugar.
Al entrar al recinto, las esperaba el gobernador Ricardo Gallardo Cardona quien, sin sostener ningún tipo de diálogo con las jóvenes, se limitó a señalarles dónde estaban apiladas las cruces, para después retirarse y dejarlas con el subsecretario Vega Arroyo.
En presencia de Vega Arroyo, las jóvenes le leyeron al subsecretario la postura difundida por las víctimas de feminicidio y le dijeron:
“Ellos están molestos por esta situación, porque la búsqueda no es un estorbo, es un derecho y tienen derecho a seguirse manifestando”.
En respuesta, el subsecretario le pidió a una de las jóvenes que le permitiera enviar un mensaje de audio a una de las integrantes de la colectiva, a la que les aseguró que se resguardarían las cruces, además de extenderle una disculpa por cómo fueron retiradas.
Vega Arroyo también se comprometió a que se dispondrán de más elementos para asegurar la protección al antimonumento, y que una vez terminado el evento y luego de retirar el mobiliario, se volverían a colocar las cruces en su lugar.