Washington, Estados Unidos (29 de junio de 2015).- Al igual que hace siete años, la Corte Suprema de Estados Unidos, declaró este lunes la inyección letal como método de ejecución constitucional. Esto, luego de ser cuestionada tras registrarse varias ejecuciones largas y difíciles.
De los nueve jueces, cinco estimaron que las demandas de condenados a muerte en Oklahoma no demostraron “un riesgo sustancial de sufrimiento” en el caso de la utilización de midazolam, un asiolítico, para ejecutar a un prisionero, por lo que hallaron que este método estaba conforme a la octava enmienda, que prohíbe los sufrimientos “crueles e inhabituales”.
Fuente: La Jornada.