En SLP, funcionarios y políticos deben entender que pandemia no es tema de política
Eduardo Delgado
El exdiputado local y exlíder estatal del Partido Acción Nacional, Héctor Mendizábal Pérez, envió un mensaje a políticos potosinos que lucran con la contingencia sanitaria. Desde su departamento en el Ayuntamiento de Chamartín, en Madrid, España, donde lleva unas dos semanas aislado, les pidió “entender que la pandemia del coronavirus no es un asunto político”.
Luego de China e Italia, el país ibérico ha sido de los más afectado en cuanto a números de personas fallecidas o contagiadas con el Covid-19. Desde que se decretó el Estado de Alarma en esa nación, a sus habitantes sólo se les permite salir a la calle una vez a la semana, a comprar alimentos y hospitales, en cuyo caso debe ser por razones estrictamente necesarias, como en el de las embarazadas.
En transmisión nacional, Miguel Ángel Villaroya, jefe de las fuerzas armadas en ese país, recomendó a conterráneos y extranjeros practicar las tres reglas de la cultura militar durante el tiempo que dure el encierro en casas o pisos: disciplina, sentido del sacrificio y la moral de la victoria.
Disciplina, sacrificio y moral de victoria…
Como disciplina, explicó el exdirigente panista, debe dormir y despertar a la hora habitual. “El día que nos avisaron de la suspensión de clases fue una persona a la escuela y nos dio instrucciones para el aislamiento. Primero debes tener una rutina diaria, porque si no entras en desesperación o en estado depresivo”, comentó.
“Tienes que programar el despertador a la misma hora, levantarte, asearte, vestirte como si fuera un día normal. Debe uno cuidar los horarios de alimentación y de dormir, porque es fácil desvelarte viendo películas o haciendo otras cosas. Se necesita mucha disciplina. Más de lo normal”, resumió.
“En situación normal las obligaciones te imponen y aislado no hay reglas, pero debes procurar hacer una actividad física, restira miento muscular, respiración, yoga, porque si no corres el riesgo de engordar”, abundó.
“Ahorita estamos en clases en línea, de las ocho de la mañana a las dos de la tarde. Terminando me hago de comer, limpio la cocina, lavo trastes. Luego me pongo a leer, estudiar, escuchar música, hago un poco de ejercicio, dos o tres llamadas, reviso correos, contesto mensajes y escribo una especie de diario”, añadió en entrevista concedida vía telefónica.
En su diario personal, explicó, “siempre he escrito, pero no todos los días. Ahorita sí, porque tengo tiempo”. Todo ello como rutina.
Como sentido de sacrificio asume que debe permanecer recluido, como una medida para “cuidarnos y cuidar a los demás”. La moral de la victoria consiste en tener la certeza de que al final “vas a ganar” y que “esta crisis va a pasar”.
Prácticas, dijo, con las que “se puede uno mantener mentalmente fuerte durante esta etapa. En mi caso no sólo estoy encerrado, estoy solo”, precisó.
Durante la contingencia, expuso, lo que más le ha costado trabajo es cuidar la alimentación, en el sentido de no comer todo el día, “porque el encierro produce ansiedad y comes de más”.
En México, ni una cama de hospital por cada 100 habitantes
Luego de referir que cuando surgió el Covid-19 en China, en España no se consideró la posibilidad de que se expandiera como hasta ahora por todo el mundo y advirtió que “México va por el mismo camino”.
Durante la segunda semana de este mes “todo era normal; nos pegó fuerte, cuando nos suspendieron las clases”.
Reiteró: “Desde acá parece que (México) va por el mismo camino y es que nadie aprende en cabeza ajena. Es muy triste. Aquí pasó algo similar, porque la gente no tomaba conciencia de la gravedad, hasta que comenzó a morir gente y se adoptaron medidas radicales. Eso sensibiliza mucho más. Tristemente uno dice ´Volteen a ver lo que pasó acá’”.
En dos semanas cambió todo en España. “Había mucha gente escéptica, compañeros que no creían”.
“Desde el punto de vista de política pública es muy difícil tomar medidas, porque todas tienen un costo y se debe cuidar que este no sea mayor al perjuicio de la enfermedad”, expuso.
“Se sabe que el 80 por ciento de las personas infectadas van a superar el contagio sin mayor problema, con una gripe normal y algunos sin síntomas, pero el vector de contagio es muy alto, el doble o triple del resfriado común”, advirtió.
Además, los síntomas pueden aparecer en 12 días y en ese periodo de incubación las personas pueden estar infectando a otras sin saberlo, acotó.
Por esa razón, apuntó, la importancia del aislamiento, porque es la única medida efectiva para contener los contagios.
“Creo que (en México) vamos tarde, pero eso es difícil valorarlo y tampoco creo mucho en las cifras oficiales. Lo que se ve de lejos es que no están para nada preparados”, juzgó.
Estimó que España tiene cinco camas de hospital por cada 100 habitantes; Alemania 10 y por eso registra pocos decesos. “Nosotros no llegamos ni a una”, deploró.
Dada la magnitud de la propagación en esa nación ibérica no hay suficientes Unidades de Cuidados Intensivos (UCI´s). No hay abasto. “Es muy triste porque la familia no puede acompañar a los pacientes en los hospitales y la gente muere sola”.
Incluso los pasillos en los nosocomios están saturados y muchas personas mueren por falta de atención. “Se podrían salvar si se tuvieran los medios. Si hubiera una Uci disponible, donde se pudiera entubar al paciente, darle un ventilador”, añadió.
“Yo no veo que en México ni en San Luis estemos preparados. Habría que investigar cuantas UCI´s hay en San Luis, pero apuesto que entre todos los hospitales no suman 100, contados públicos y privados”, calculó el político potosino.
Funcionarios y políticos
Al pedirle su opinión acerca del comportamiento de los políticos en San Luis Potosí, cuya intención parece ser lucrar políticamente con la contingencia, Héctor Mendizábal antepuso:
“El tamaño de las medidas que se deben adoptar no son competencia de los gobiernos estatales. Un estado de alarma no lo puede declarar quien sea. Puede hacer una declaración, pero no tiene legalmente ninguna repercusión”.
La declaratoria de estado de alarma o emergencia sólo la pueden decretar las autoridades federales y aparte en México una proporción muy grande de mexicanos trabaja para comer, anotó.
“En México, lo triste, es que no se ve por ningún lado… no digo en las potencias del mundo. El Salvador aplazó el pago de servicios por tres meses y entre otras medidas suspendió las hipotecas, para que la gente este tranquila”, refirió.
En el caso de los presidentes municipales, cuestionó: “¿Qué pueden hacer?, si no les alcanza para pagar nómina ni para hacer una obra; ¿Quién les hace caso? ¿De qué tamaño son sus policías?… tienen muy poco margen de maniobra y facultades. Entonces si desde arriba no se pone el ejemplo, abajo hacen lo que pueden”, consideró.
“Ya escuché a varios alcaldes declarando el estado de emergencia en sus municipios y eso no existe. Sé que han ordenado el cierre de negocios, pero si alguien se opone no lo pueden obligar”.
Más hace la sociedad… AMLO causa de mofa
A su parecer “más está haciendo la gente. Más que los gobiernos de todos los niveles. La suspensión de clases era para el 22 y muchos estados se adelantaron”, dijo en alusión a las entidades del país que anticiparon la suspensión de clases en las aulas.
Cuestionado acerca de si en México está más preparada la sociedad que los políticos, y de si estos son igual en España, respondió: “No. Aquí percibo más conciencia solidaria de todos. Es un problema en el que requiere cerrar filas y quien lleva la batuta es el gobierno y en México eso no ésta pasando”, acotó.
Hace 11 años, recordó, cuando se presentó la crisis sanitaria de la influenza “Felipe Calderón llevó la batuta. También fue criticado y no faltó quien dijo que impuso medidas exageradas, incluido Andrés Manuel López Obrador. Están los videos cuando dijo que se estaba afectando mucho la economía”.
En el contexto internacional, mencionó la postura de la canciller alemana, Ángela Mérkel, quien declaró que este es la peor crisis después de la segunda guerra mundial. La del primer ministro de Francia, Edouard Phillipe, quien anunció que les pedirá a los franceses un sacrificio para superar esta etapa.
El presidente de España, Pedro Sánchez, asumió que como esto no se había vivido nada igual desde la guerra civil. En contra parte, apuntó, el mandatario mexicano “ha sido motivo de burlas y de preocupación”, lamentó.
Cuestionó: “¿Cuáles son las medidas de apoyo a la población? ¿Cómo va a salvar la economía?… porque no te puedes aislar del mundo. Aunque dejaras abierto, si el mundo está cerrado te paraliza. El 80 por ciento de nuestra producción es exportada a Estados Unidos”.
El precio del petróleo está por los suelos, los ingresos caídos, la economía deprimida y con la crisis sanitaria “se ve un poco negro el panorama. Lo único es lo que pueda hacer la sociedad civil. No te puedes fiar”.
“López Obrador centralizó los poderes y eso ya lo habíamos dejado atrás. Ahora él tiene que centralizar la responsabilidad de lo que está pasando y de lo que vaya a suceder”.
Admitió que, casi por naturaleza, los mexicanos dudan de los políticos y gobernantes, pero aparte señaló: “Hay cosas que te hacen dudar más, porque la burra no era arisca”.
“Hay medidas que pueden abonarle a la credibilidad y otras le restan, como la falta de acciones”, agregó.
Por ejemplo, la estrategia de Corea, seguida por germanos y estadounidenses, consiste en la aplicación de test “a todo mundo”. En México a nadie se le aplican, “los test privados están carísimos y de manera oficial no existen, lo que no ayuda a la credibilidad en el gobierno”, opinó.
En España hubo personas que murieron y en el acta de defunción se atribuyó su deceso a una neumonía, tuvieron que hacer una autopsia y sumar sus muertes al coronavirus, porque no había test. Fue el caso de unos 140 muertos, añadió.
Héctor Mendizábal viajó a esa nación en septiembre del año pasado. Derivado de la contingencia pensó en regresar a México. “Un tercio de mis compañeros, en un programa académico de postgrado, volvieron a sus países con el riesgo de llevar el virus. Por eso decidí esperar”. Afortunadamente, dijo, él no ha presentado síntomas.
Los políticos mexicanos deberían voltear a ver lo que ha pasado en otros lados y tomar las medidas necesarias, debatir el costo de las medidas y el beneficio, porque están de por medio vidas.
“Acá una vida vale todo. Así sea una persona de 95 años. Se justifican todas las medidas para prevenir la muerte de cualquier ciudadano y eso lo tenemos que entender todos. Empezando por los funcionarios y los políticos”, aseveró.
“Mi recomendación es exigir a las autoridades que asuman responsabilidades y tomen decisiones, porque en México falta liderazgo”, subrayó.