Por: Citlali Bravo.
El hecho de enterrar a los difuntos, es un acto simbólico que en nuestra cultura “representa el paso de la vida a la eternidad”, según palabras de Don Paco, quien se dedica a fabricar lápidas para el panteón El Saucito.
Más allá de la tradición religiosa, la importancia de sepultar a los muertos representa la tranquilidad de sus seres queridos de tener un lugar donde honrarlo.
“Yo creo que ponerle una lápida es importante para que no se vea sólo el montón de tierra, y para poder ir a verlo, saber que ahí está”, dice Angélica, cuyo padre se ha dedicado desde hace más de 30 años a la fabricación de lápidas.
Sin embargo, no siempre es posible llevar a cabo este acto, como es el caso de los cuerpos encontrados en fosas clandestinas. “Pienso que es muy triste, esas personas no recibieron ningún ritual sagrado, y sus familias se privaron de poder verlos, llorarles. Ya ahí se llega a un asalto del derecho de los familiares de tener a su ser querido.” Comentó Leonardo Mendoza, inspector en el cementerio El Saucito.
“Me ha tocado ver que los familiares van a la policía, a las autoridades, y han llegado a recuperar a algunos cuerpos, hace poco trajeron a dos a enterrarlos.” Dijo Leonardo.
En el estado, se han encontrado 93 fosas clandestinas desde 2007 con 131 cadáveres.