Carlos Rubio
Si la Feria Nacional Potosina se sigue realizando en agosto, quiere decir que a Ricardo Gallardo Cardona sólo le quedan dos ediciones más por celebrar antes de que se dispute la gubernatura de San Luis Potosí en el 2027, pero si se moviera a mayo, como ya sugirió, tendría una edición más por celebrar y qué temporada tan oportuna, justo un mes antes de las elecciones… qué casualidad.
Suele ser complicado dimensionar el alcance de un Gobierno y la influencia que suele tener en diversos sectores. A veces pensamos que sería muy hollywoodesco pensar que el Gobierno tiene agentes infiltrados en las calles y espías escuchando las llamadas, pero esto está más cerca de la realidad de lo que podríamos imaginar. Basta con ver la forma en la que operó la administración estatal con el caso de la mujer que murió la semana pasada en la Feria Nacional Potosina.
Cuando empezó a correr el rumor de que alguien había muerto en la Fenapo, una camioneta de la Fiscalía General del Estado ya estaba en las instalaciones haciendo peritajes, con la zona acordonada y la gente a las afueras expectante. Al cabo de dos horas el lugar ya estaba limpio y sólo los pocos que presenciaron el hecho sabían la verdad, porque la autoridad no ofreció ninguna información oficial al respecto hasta este lunes. Lo que siguió de eso fue una pequeña muestra de cómo opera el Estado en situaciones que significan un riesgo para ellos.
Aunque ya nada puede ganarle a la velocidad a la que circula un chisme en las redes sociales, ni si quiera los medios de comunicación, ver una noticia en medios “reconocidos” sigue generando un poco más de confianza que verla en el muro de la tía Bertha. Aunque la mayoría ya perdió la credibilidad que se ganó en los tiempos del PRI, sí hay cierto tipo de notas en las que se puede confiar, pero aun así hay que tener los ojos bien abiertos para una doble lectura.
Todos, absolutamente todos los medios de comunicación publicaron en sus páginas web sobre la muerte de una mujer en la Fenapo, hasta los que operan a favor del Estado. La diferencia fue después, cuando se pudieron leer las portadas de aquellos que aún sobreviven en el impreso.
Medios como Plano Informativo, El Heraldo y El Sol de San Luis no mencionaron en su portada del día siguiente lo ocurrido un día antes en la Fenapo, a pesar de que, por un tiempo, sí ocupó el espacio principal de sus páginas web.
Pulso le guardó una pequeña esquina, a pesar de que publicar el video en X le trajo 44 mil visualizaciones, más que cualquier nota del último mes.
No es casualidad este manejo de la información ni el tema fue menor como para esconderlo en las últimas páginas del diario con el boletín que envió la Fiscalía. Es el poderío que ejerce el Estado sobre la información y la capacidad que tiene para esconder la realidad, o al menos, matizarla.
Es muy diferente leer: “Tragedia en la Fenapo; mujer muere al caer de rueda de la fortuna”, que leer: “Fiscalía investiga muerte en la Feria”.
El trasfondo es más grande de lo que imaginamos, así como la operación que hay detrás. Tampoco debió haber sido gratis esta operación; el silencio cuesta y mucho.
Y la nota de la tragedia ni si quiera sobrevivió en todos los portales electrónicos, en algunos ya no fue posible encontrarla.
A la par, también se comenzó a maquinar una versión de que lo que ocurrió en la Feria fue un suicidio. Una forma muy cruel de querer desviar la atención y sobre todo muy baja para quienes la difundieron.
Comunicadores y medios fueron quienes, sin ninguna mínima prueba y sin ningún sentido, echaron a andar sus manos y se encargaron de darle vuelo a esta historia, que casualmente exculpaba de toda responsabilidad al Gobierno del Estado y hasta al operador del juego.
Unas pequeñas muestras de que las narrativas que es capaz de crear el Estado y muchas veces se pueden quedar como la verdad absoluta, si no hay nadie que esté ahí para cuestionarlas.
Para el gobernador Ricardo Gallardo Cardona, la Feria Nacional Potosina no es poca cosa, es su fiesta, su trono desde donde dicta el ritmo del estado durante un mes completo, al compás que mejor conoce, el de la banda, el de la fiesta y el de las masas.
Las opiniones aquí expresadas son responsabilidad del autor y no necesariamente representan la postura de Astrolabio.
Es Licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí. Actualmente es jefe de información de Astrolabio Diario Digital, con interés y experiencia en Transparencia y el Derecho de Acceso a la Información Pública. Formó parte de la tercera generación del MásterLab en edición de investigaciones organizado por Quinto Elemento Lab.