Antonio González Vázquez
Al exponer que hasta ocho de cada diez potosinos piensan en la actualidad que el problema de la inseguridad va a empeorar, el diputado Pedro César Carrizales Becerra presentó una iniciativa de ley para que en la Constitución del Estado el concepto de paz se considere como derecho humano.
El legislador propone la adición de un párrafo cuarto al artículo 8 de la Constitución Política del Estado “con el objetivo de integrar dentro del orden jurídico interno a “la paz” como un Derecho Humano y con ello obligar a que las decisiones públicas fomenten en todo momento su realización”.
El cuarto párrafo que se propone dice así: “todas las personas potosinas tienen derecho a vivir sin violencia; el estado tiene el deber fundamental de fomentar las condiciones que garanticen la paz social”.
La iniciativa será presentada al pleno del Congreso del Estado en su sesión ordinaria del 30 de octubre, según consta en la Gaceta Parlamentaria.
La iniciativa busca integrar en un orden Constitucional Local la noción de “Paz” como un Derecho Humano, a contrario “sensu”, se interpreta como la imposición de un deber al Estado de San Luis Potosí para actuar bajo los fines de satisfacer este concepto en cada una de las decisiones públicas, en todos los poderes y desde los ordenes estatal y municipales de gobierno.
En su exposición de motivos, el legislador anota estadísticas oficiales que confirman el aumento de la inseguridad y precisa que de 2015 a 2019 en México hubo más de 150 mil muertos como resultado de la violencia.
Para el caso de San Luis Potosí, precisa que “8 de cada 10 personas potosinas piensen que la tendencia de la seguridad pública siga igual de mal o que empeorará con el tiempo; situación grave en sus consecuencias por que genera el riesgo de continuar “normalizando” y “adaptando” a la vida diaria las conductas antisociales”.
Lo mas alarmante de ello, es que la aceptación colectiva de que las conductas ilícitas seguirán llevándose a cabo con la regularidad actual o aún mas, no solo nos indica un “sentir” lógico, sino que también trasciende en diversos fenómenos que dificultan aún más contrarrestar la recurrencia de las actividades que lesionan la paz social, pues en la pérdida de la “capacidad de asombro”, se deja de visualizar el problema en los términos de su gravedad, y naturalmente esto ocasiona una especie de aceptación del contexto e incluso puede darse una instintiva adecuación de nuestra forma de vida.
Todo ello, solo puede entenderse como un proceso en el que la sociedad pierde sensibilidad frente a las conductas ilícitas y promueven una motivación para que más personas puedan actuar fuera de los límites de la ley.
Y agrega que la iniciativa busca reconocer como derecho: “la Paz”; para que una vez que sea formalizado en nuestra Constitución Local, ésta se convierta de manera histórica e inéditamente en la primera Constitución Local dentro del país que reconozca un instrumento exigible frente al Estado que dote de las garantías suficientes y adecuadas a las personas que habitan y transitan por San Luis Potosí, para que todas las decisiones públicas, en los tres poderes y desde los ordenes estatal y municipal de gobierno tengan como fin aspiracional, consolidar una armonía plena, individual y colectiva, que se materialice en una vida libre de violencia y en el pleno goce y ejercicio de los Derechos Humanos que se le reconocen a las personas potosinas en su máxima proyección.